Médicos españoles concluyen que los ingredientes naturales de la cerveza fermentada están asociados a una reducción del riesgo cardiovascular y una mejoría en el control de la tensión arterial.
Un estudio realizado por el Hospital Clínico San Carlos de Madrid revela que el consumo moderado de cerveza, y de otras bebidas fermentadas puede reducir el riesgo de sufrir hipertensión.
El estudio lleva el nombre de “Importancia del estilo de vida saludable en el hipertenso. Efecto del consumo moderado de cerveza”, y fue realizado por el doctor José A. García Donaire, del Servicio de Investigación Biomédica y las doctoras María Abad y Nieves Martell de la Unidad de Hipertensión Arterial de ese hospital.
Este sugiere que los ingredientes naturales de la cerveza están “significativamente” asociados a una reducción del riesgo cardiovascular y una mejoría “considerable” en el control de la tensión arterial, siempre que se consuma de manera moderada. Éstos junto a otros datos serán distribuidos por la Sociedad Española de Hipertensión y el Centro de Información Cerveza y Salud a pacientes de las Unidades de Hipertensión de los hospitales andaluces.
El autor del estudio, García-Donaire afirma que “El mantenimiento de un estilo de vida saludable también puede ayudar a retrasar o a prevenir de forma segura y eficaz la aparición de la enfermedad”.
Además los expertos consideran que otra de las ventajas del consumo moderado de cerveza tiene que ver con su bajo contenido de sodio, ya que el incremento de la presión arterial está relacionado con el consumo de alimentos de alto contenido de sal.
A su vez sugieren otras recomendaciones para las personas hipertensas como aumentar las actividades físicas y realizar ejercicios moderados durante por lo menor media hora entre cinco y siete días a la semana. ♦