El Athletic y el Valencia dejaron el pase a la final de la Copa del Rey muy abierto tras empatar por 1-1. El encuentro, accidentado, lleno de ritmo, ocasiones, protestas y llegadas de peligro, se convirtió en una guerra futbolística que se puso muy de cara para los ‘leones’, pero que corrigió Hugo Duro. El gol bilbaíno fue de Raúl García.
Hubo paz relativa en la ‘guerra’ de San Mamés. Relativa, porque aún queda la batalla de Mestalla para dirimir el pase a la final de la Copa española. Paz, porque el Athletic y el Valencia empataron en la ida de las semifinales.
El cara a cara fue entretenido y saltaron chispas. Ya desde los primeros compases, el centro del campo bien desaparecía o bien aparecía más bien poco. Aquello de las posesiones largas para estudiar al rival pasó a un segundo o quizá tercer plano. Cada conjunto, con su propuesta, trató de dominar mordiendo.
Los ‘leones’ confiaron en su poderío como bloque más que en sus individualidades. Iñaki Williams, que no estuvo especialmente fino, dejó sitio en la pasarela de protagonistas para otros hombres clave como Raúl García, autor del gol local; Berenguer, insistente, o Muniain, encargado de aportar ese extra de precisión al pase que, de hecho, dio origen al 1-0.
En el ataque del Valencia, el claro protagonista era Bryan Gil. Su desborde marcó el compás de las acometidas ‘ches’. Si tocaba robar balones arriba, lo hacía; si debía recortar desde la banda, igual, y, si lo que pedía el partido era servir centros, respondía de la misma manera. Mantuvo vivas las esperanzas de los suyos incluso cuando, en la segunda mitad y perdiendo por la mínima, daba la sensación de que el empate no iba a llegar nunca.
Hugo Duro jugó bien su papel de referencia arriba -logró el gol de las tablas- y Carlos Soler les acompañaba distribuyendo aunque sin encontrar mucho a Guedes. Diakhaby, desde la defensa, atrajo las cámaras desde el minuto 1. Tuvo sus más y sus menos con todos y miles de conversaciones con el árbitro.
El referì Munuera Montero, con mucho trabajo, intentó resolver toda polémica que se le cruzó con calma, sin desenfundar tarjetas rojas, aunque pudo hacerlo. Dani García estuvo cerca de ganársela cuando, en la segunda mitad, raspó la rodilla de Carlos Soler con los tacos. Ni en esta acción ni en una entre Vivian y Hugo Duro en la que el defensa desequilibró al delantero con el brazo y lo tiró al suelo vio nada el colegiado, que, tras un alboroto previo al descanso, sí fue estricto y expulsó a Maxi Gómez por protestar en el túnel.
El partido terminó con un 1-1 que obliga a ambos equipos a jugársela en Mestalla, donde el ‘factor campo’ beneficiará al Valencia. San Mamés podría haber provisto de muchos más goles al duelo de vuelta porque el choque se prestó a ello, pero, al final, tan solo Raúl García y Hugo Duro vieron el arco.
🎯 ¡¡𝗥𝗨𝗟𝗢!!
🎁 Gran centro de @IkerMuniain10 y el navarro bate las redes del conjunto che con un preciso testarazo.
✊ Horrela jarraitzera, mutilak‼️
1-0 I #AthleticValencia 🏆 #AthleticClub 🦁 pic.twitter.com/0gENzHjnxN
— Athletic Club (@AthleticClub) February 10, 2022
El ‘león’ lo hizo en el minuto 37, cuando remató de cabeza, a bocajarro, uno de esos centros que Muniain pone con veneno. Mamardashvili, con alguna que otra desconexión como un zapatazo al aire cuando trataba de despejar un pase atrás de Diakhaby que casi termina en autogol, careció de tiempo para reaccionar.
Ya en la segunda mitad, los ‘ches’ igualaron y lo hicieron por mediación de Hugo Duro, pero, en cierto modo, de Bryan Gil. Un golpeo acrobático a un centro a media altura facilitó que cazara el rechazo y lo mandara al fondo de la red.
Con el 1-1 en el marcador, la situación dio un vuelo y fue el Valencia el que más rozaba un gol que habría sido el de la remontada. Los del DT Marcelino García, fueron en busca del 2-1 en cuanto podían, soportaron el chaparrón, aguantaron el resultado y mantuvieron sus opciones, que pasarán por rendir el reino de Mestalla.
Fuente Livescore – foto Twitter
⊕