SAN JOSÉ.- La Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) recibió una denuncia contra Costa Rica por la presunta violación a la libertad de expresión de dos periodistas que en 2007 fueron condenados civilmente por un reportaje.
La Cancillería costarricense informó este viernes que la Corte IDH le notificó que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) le presentó la denuncia por el caso «Moya Chacón y otros contra Costa Rica”.
A partir de ahora, las partes tendrán dos meses para presentar sus argumentos y pruebas por escrito a la Corte IDH.
Los hechos se remontan al año 2005, a raíz de un proceso judicial por los delitos de calumnias y difamación, interpuesto por un funcionario policial contra los periodistas Freddy Parrales Chaves y Ronald Moya Chacón.
En el año 2007, un tribunal costarricense absolvió a los periodistas de toda responsabilidad penal, pero establecieron una sanción civil al determinar que una nota periodística publicada había causado daño moral al funcionario que los denunció.
Los periodistas presentaron recursos de casación ante la Corte Suprema de Justicia, pero la Sala de Casación ratificó el fallo.
Luego de agotar las instancias judiciales costarricenses, los periodistas acudieron a la CIDH, la cual, en su análisis de fondo, determinó que el Estado violó el derecho a la libertad de expresión y el principio de legalidad y retroactividad en perjuicio de los periodistas, y recomendó dejar sin efecto la sanción civil que les fue impuesta en sede judicial.
Ante esto, la CIDH decidió interponer el caso ante la Corte IDH.
«El Estado costarricense reitera su absoluto respeto a los procesos internacionales conocidos por la Corte Interamericana de Derechos Humanos como órgano jurisdiccional del Sistema Interamericano de Derechos Humanos, y garantiza que su participación en el presente proceso respetará en todo momento los principios fundamentales de este órgano», expresó la Cancillería costarricense.
Costa Rica ha sido condenada en dos ocasiones por la Corte Interamericana. La primera en 2004 también por una condena judicial a un periodista; y la segunda en 2012 por la prohibición a la fecundación in vitro. EFE