SAN JOSÉ.- Los expresidentes de Costa Rica Óscar Arias y José María Figueres han abierto hoy una pugna por el poder a lo interno del Partido Liberación Nacional (PLN), en la que están envueltas sus aspiraciones de reelección presidencial, cuando falta año y medio para los comicios de febrero del 2018.
Arias, premio Nobel de la Paz 1987 y dos veces presidente (1986-1990 y 2006-2010), afirma que aún no ha decidido si aspirará a un tercer mandato, pero lo que sí tiene claro es que no quiere que Figueres, mandatario entre 1994 y 1998, sea el candidato del PLN.
«Lo que considero es que los dos expresidentes nos debemos hacer a un lado y auspiciemos nuevos liderazgos», dijo Arias tras una reunión con Figueres este lunes en la que no alcanzaron ningún tipo de acuerdo.
Arias aseguró que dentro del PLN (socialdemócrata) «hay jóvenes muy preparados, mejor calificados, con dotes intelectuales y morales» que pueden aspirar a la candidatura del partido en lugar de los exmandatarios.
«Solo los dictadores se aferran al poder y ninguno de los dos lo somos, somos demócratas. Además, nadie es indispensable, ni él ni yo», aseguró el nobel de la Paz tras la reunión con Figueres.
Figueres Olsen, hijo del fallecido expresidente y uno de los mayores líderes políticos en la historia costarricense José Figueres Ferrer, rechazó rotundamente retirarse de la contienda política que tendrá como cúspide la convención del PLN el 2 de abril próximo, en la que las bases del partido decidirán al candidato para los comicios del 2018.
«Él me ha respondido que no y respeto su decisión. Él tiene sus razones. Me duele que rechace la propuesta, pero lo entiendo», expresó Arias, quien tampoco se ha retirado.
El expresidente ha dicho que se tomará unas semanas para seguir «consultando con la almohada» y decidir si busca de nuevo la presidencia, aunque también envía mensajes claros sobre su confianza en una victoria, y otros algo contradictorios.
«Estoy dispuesto a ir a una convención que sé que voy a ganar y a una elección (presidencial) que sé que voy a ganar, pero no me interesa ser presidente por tercera vez, lo que me importa más es poder gobernar y en la Costa Rica de hoy es cada vez más difícil gobernar», manifestó.
Arias se quejó de que en su país cada vez hay más partidos políticos, lo que, a su juicio, hace más difícil que se pueden alcanzar grandes acuerdos nacionales para el desarrollo del país y desarrollar con éxito un plan de gobierno.
Por su parte, Figueres aseguró que cualquier persona tiene la posibilidad de aspirar a la candidatura por el PLN y que no se retirará de la contienda, pues considera que tiene la capacidad y el equipo humano para «darle rumbo a Costa Rica».
«Será el pueblo liberacionista el que escoja al que considere como el mejor preparado. Yo me considero con la experiencia el conocimiento del mundo, las fuerzas, la voluntad y la energía para ir nuevamente al gobierno», afirmó Figueres.
En repetidas ocasiones durante los últimos meses Figueres le ha exigido públicamente a Arias que oficialice o descarte la candidatura en el PLN, lo que el Nobel de la Paz ha evadido con la justificación de que aún lo está consultando con su familia y amigos cercanos.
El PLN, el partido con más trayectoria en Costa Rica, sufrió una dolorosa derrota en los comicios del 2014, cuando su candidato Johnny Araya se retiró de la contienda en la segunda ronda contra Luis Guillermo Solís, del centroizquierdista Partido Acción Ciudadana (PAC).
Solís, a quien las encuestas situaban como máximo en el cuarto lugar, sorprendió a propios y extraños al ganar la primera ronda y obligar a una segunda, de la que Araya se retiró al considerar que no tenía posibilidades para ganar.
Los expresidentes Arias y Figueres han manifestado su intención de hacer resurgir al PLN y han criticado al Gobierno de Solís, formado en el PLN, cuyo partido, el PAC, está en el poder por primera vez en la historia.