LONDRES.- El Ministerio británico de Sanidad ha puesto en «pausa» el sistema de recuento diario de fallecimientos ocurridos por la COVID-19 en el Reino Unido, mientras lleva a cabo una revisión sobre supuestos «fallos estadísticos» detectados en la manera de calcular las defunciones.
El titular británico de Sanidad, Matt Hancock, encargó esa revisión a raíz de que investigadores identificaran esos defectos en la manera de contabilizar las muertes en el conjunto del país registradas tras un test diagnóstico.
En su web, se indica hoy que en las últimas veinticuatro horas se detectaron en el Reino Unido 827 nuevos casos de positivos por coronavirus y que el total de afectados desde el inicio de la pandemia asciende a 294.066.
El primer ministro británico, Boris Johnson, sugirió este viernes que el país podría volver a un estado de «normalidad» antes de las próximas navidades.
En este sentido, el experto John Edmund -integrante del grupo científico asesor del Gobierno, el llamado Sage- opinó hoy que aún «hay un largo camino por recorrer» para que se dé un regreso a la normalidad, con lo que contradijo aparentemente el mensaje enviado por el líder tory.
«Si por normalidad se entiende lo que solíamos hacer hasta el pasado febrero y mediados de marzo, ir a trabajar normalmente, viajar en autobuses y trenes, ir de vacaciones sin restricciones, quedar con amigos, darnos la mano, abrazarnos, etc, desafortunadamente todavía queda mucho camino por recorrer», declaró Edmund a la emisora BBC Radio 4.
Según este científico, «no podremos hacer nada de eso hasta que seamos inmunes al virus, lo que implica que no será hasta que tengamos una vacuna que sea segura y efectiva».
«Si volvemos a ese tipo de comportamientos normales, el virus regresará muy rápidamente», alertó.
El Ejecutivo conservador prosigue con su plan de desescalada en Inglaterra a fin de reavivar la economía nacional, paralizada durante el confinamiento.
El Gobierno de Johnson anunció este viernes que ha conferido nuevos poderes a autoridades locales para que estas puedan, desde hoy, actuar con mayor rapidez en caso de que se localicen rebrotes del coronavirus.
Johnson detalló que a partir de este sábado «las autoridades locales tendrán nuevos poderes en sus áreas para cerrar instalaciones específicas, clausurar espacios públicos al aire libre y cancelar eventos», lo que permitirá «actuar de manera más rápida en respuesta a brotes, en un momento en que la rapidez es vital». EFE