LONDRES.- El Reino Unido registró en las últimas veinticuatro horas otras 176 muertes por la COVID-19, confirmadas tras la realización de un test, hasta contabilizar 43.906 desde el comienzo de la pandemia, según datos divulgados este miércoles.
El Ministerio británico de Sanidad informó de que desde ayer se han detectado 829 nuevos contagios de coronavirus.
Pese a que el Reino Unido es actualmente el país más afectado en Europa en cuanto a número de decesos por la enfermedad y el tercero del mundo tras Estados Unidos y Brasil, el Gobierno británico continúa adelante con su plan de desescalada.
El siguiente paso se dará el próximo sábado con la reapertura de pubs, cafeterías y restaurantes, entre otros locales, a fin de reactivar la economía.
Esas medidas obedecen a la creciente presión que afronta el primer ministro británico, Boris Johnson, para tratar de impulsar la economía nacional, muy dañada a causa de la pandemia, al tiempo que mantiene las normas de seguridad para evitar rebrotes del virus, que ya se han sido identificados en algunas zonas de Inglaterra, como la ciudad de Leicester.
Johnson ha sido cuestionado por su manejo de la crisis, ya que a la inicial falta de pruebas y equipos de protección se han sumado la distribución de test de anticuerpos que no han resultado fiables y el fracaso en implantar un sistema efectivo de rastreo de contagios, tras prometer que ambas herramientas iban a ser punteras. EFE