MOSCÚ.- Rusia está a punto de alcanzar los 400.000 casos de COVID-19 con un incremento diario entre 8.000 y 9.000 nuevos pacientes desde hace una semana y una tendencia cada vez más clara a la reducción de los índices de transmisión.
Según los datos divulgado hoy por el centro operativo de lucha contra la pandemia, la cifra total de contagios durante la última jornada ascendió a 396.575 en 83 regiones rusas, tras la detección de 8.952 nuevos casos.
De ellos, 3.747 pacientes (el 41 %) son asintomáticos.
En total han sido dadas de alta 167.469 personas, aproximadamente uno de cada tres del total de contagiados.
Entretanto, el número de casos activos se mantiene estable desde el pasado 25 de mayo, cuando alcanzó su máximo (230.996 casos) y ronda los 224.000.
Durante la última jornada fallecieron 181 pacientes, un día después de que el número de muertes se incrementase de 174 a 232, la mayor cifra de mayo.
La jefa de la sanidad rusa, Anna Popova, ya advirtió de que el número de fallecidos por la COVID-19 subiría después de que el país superara la meseta de nuevos contagios.
En total, en Rusia han fallecido al menos 4.555 personas.
La situación en Moscú, principal foco de la pandemia en el país, mejora paulatinamente para ceder protagonismo a las regiones rusas.
El estado operativo informó que en la capital rusa se detectaron 2.367 nuevos casos y 78 fallecidos, para sumar un total de 178.196 casos de la enfermedad.
El índice de transmisión de la COVID-19 en Rusia está por debajo de 1, al nivel de 0,95, mientras que en Moscú se redujo al 0,80.
En Rusia este índice lleva ya 17 días por debajo de 1, y en la capital se acerca a las tres semanas de valores por debajo de 1.
El índice de transmisión muestra la cantidad promedio de personas que puede infectar un contagiado hasta el momento de su aislamiento.
Las autoridades sanitarias rusas estipulan que las regiones en las que este índice sea igual o menor a 1 pueden pasar a la primera fase de desescalada con la condición de que dispongan de una reserva suficiente de camas hospitalarias libres.
Si el coeficiente baja al nivel de 0,8 o menos, la región puede pasar a una segunda etapa, y si se reduce al 0.5 o menos, a la tercera. EFE