NUEVA YORK.- El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) ha creado un Equipo de Respuesta ante Emergencias para brindar asistencia y proteger la seguridad de los periodistas en zonas de riesgo, según informó hoy.
De acuerdo con un informe, la nueva comisión se dedicará a proporcionar información a los periodistas sobre cualquier contingencia o amenaza existente, brindar asistencia rápida sobre el terreno y promover su seguridad mediante el desarrollo de mecanismos de evaluación de riesgos.
El CPJ con sede en Nueva York, señala la necesidad de reforzar el apoyo a los profesionales de los medios de comunicación frente a amenazas, tales como la propagación de grupos no estatales violentos, la represión y el creciente autoritarismo de los gobiernos.
«Los últimos seis años han sido los más mortales y peligrosos para los periodistas desde que el CPJ comenzó a monitorear los ataques contra la prensa, especialmente debido a la violencia de ciertos grupos políticos y religiosos y del crimen organizado», asegura el autor del informe, Robert Mahoney.
La organización destaca que los periodistas alrededor del mundo corren el riesgo de ser asesinados o secuestrados por motivos políticos, de ser víctima de un fuego cruzado o blanco de los cárteles de droga como forma de advertencia a las autoridades.
Según el CPJ, la represión y la impunidad ponen en peligro la vida y la libertad de los periodistas, y fomentan un clima de temor y autocensura entre ellos, lo que hace que se pierdan «noticias de interés público».
«Esto tiene consecuencias para todas las libertades, mucho más allá de la libertad de expresión (…) Una democracia sana depende del libre flujo de información y opinión», destaca.
Además, el CPJ subraya que, pese a que los avances tecnológicos facilitan el ejercicio del periodismo, esos mismos cambios suponen nuevos riesgos, ya que la exposición en la red hace que los informadores puedan ser rastreados y se conviertan en objeto de vigilancia y hostigamiento.
Por otro lado, la demanda global de profesionales «freelance» se ha incrementado ya que, gracias a la tecnología móvil y a las plataformas digitales, ser corresponsal extranjero «nunca ha sido tan fácil».
No obstante, la organización denuncia la vulnerabilidad de los «freelance» y los periodistas locales, especialmente aquellos que cubren zonas de conflicto, cuyos bajos salarios, a medida que aumentan los peligros, tienen consecuencias importantes para su seguridad.
El CPJ considera que los esfuerzos para combatir la violencia contra los periodistas son «desiguales» y «poco eficaces», por lo que ha elaborado además una guía con una serie de recomendaciones a seguir por parte de los medios de comunicación y los gobiernos para hacer frente a estos desafíos y promover una mejor seguridad para los informadores.