BOGOTÁ.- Las autoridades peruanas no deben objetar la apelación interpuesta por el periodista Christopher Acosta y el director de la editorial Penguin Random House Perú, Jerónimo Pimentel, contra su reciente condena por el delito de difamación. Además, las autoridades deben dejar de utilizar las disposiciones penales sobre la difamación contra la prensa, declaró el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés).
El 10 de enero, un juez penal de Lima, la capital peruana, declaró a Acosta y a Pimentel culpables de difamar a César Acuña, exalcalde, exgobernador, excongresista y dos veces candidato presidencial; los condenó a dos años de prisión suspendida; y ordenó a Acosta, Pimentel y Penguin Random House Perú pagar a Acuña una reparación civil de 400.000 soles (102.608 dólares estadounidenses) por daños y perjuicios, según varias informaciones de prensa y una copia de la sentencia, a la cual tuvo acceso el CPJ.
Acuña presentó su querella en respuesta al libro de Acosta Plata como cancha: secretos, impunidad y fortuna de César Acuña, que salió publicado en febrero de 2021 por la editorial Penguin Random House Perú. En la obra, numerosas fuentes citadas por nombre afirmaban que Acuña estaba implicado en la compra de votos, la apropiación indebida de fondos públicos y el plagio, Acosta declaró al CPJ por aplicación de mensajería.
Sin embargo, Acuña nunca ha sido condenado por esos delitos y, en un fallo judicial de 49 páginas, el juez Raúl Jesús Vega determinó que 35 frases del libro constituían hechos lesivos al honor y la reputación de Acuña.
El CPJ envió mensajes de voz al abogado de Acuña, Enrique Ghersi, y a su vocero e hijo, Richard Acuña, para obtener una declaración, pero no respondieron.
ANP repudia condena a Christopher Acosta y advierte grave atentado contra el periodismo
“La decisión de un juez peruano de condenar a Christopher Acosta y Jerónimo Pimentel por el delito de difamación en relación con el libro de Acosta sobre el político César Acuña es indignante”, declaró Natalie Southwick, coordinadora del Programa de Latinoamérica y el Caribe del CPJ, desde Nueva York. “Esta absurda condena es el más reciente escandaloso ejemplo del reiterado uso de las disposiciones penales sobre la difamación y el sistema judicial peruano para suprimir el trabajo periodístico sobre asuntos de interés público”.
Acosta es editor de investigaciones del canal televisivo privado Latina Noticias, de Lima, y es un periodista muy respetado en Perú. Acosta declaró al CPJ que todas las denuncias contra Acuña que aparecen en el libro forman parte de citas textuales de sus entrevistados, artículos publicados en los medios peruanos, investigaciones realizadas por la Fiscalía General y testimonio presentado en demandas y audiencias del Congreso.
El periodista catalogó de “absurdo” el fallo condenatorio y expresó que, a menos que sea revocado en la fase de apelación, el fallo sentaría el peligroso precedente legal de colocar sobre los periodistas la responsabilidad de probar las denuncias realizadas por sus fuentes. Además, señaló que no tenía sentido incluir a Pimentel en la querella, porque, aunque dirige la división de Perú de Penguin Random House, no había tenido participación en la edición del libro.
De acuerdo con Acosta, su abogado defensor, Roberto Pereira, interpondrá una apelación en varios días. Si los tres jueces que componen la corte de apelaciones ratifican el fallo condenatorio, Pereira solicitará a la Corte Suprema de Justicia que emita un fallo sobre la causa. Por su parte, Pimentel declaró al CPJ por aplicación de mensajería que también apelaría el fallo condenatorio.
Organizaciones defensoras de la libertad de prensa y de los derechos humanos, asociaciones de editoriales y numerosos medios de prensa peruanos rechazaron con firmeza el fallo, mientras que las Naciones Unidas, la Unión Europea y la embajada de Estados Unidos en Perú respondieron con comunicados que declaraban a la libertad de prensa elemento fundamental de la democracia.
Acuña, quien terminó en el séptimo puesto en las elecciones presidenciales que Perú celebró en 2021, aplaudió el veredicto. “Esta es mi oportunidad de demostrar [mi inocencia]”, declaró Acuña al canal televisivo peruano Willax. “Yo no estoy en contra de la libertad de expresión, pero sí de la difamación”.