Un testigo, que ha solicitado acogerse a la colaboración eficaz, reveló que la cúpula de Fuerza Popular ordenó retirar, el 7 de diciembre, documentación contable potencialmente comprometedora del local partidario ubicado en el jirón Morochucos 140, Santiago de Surco.
El testigo también dio a conocer que los documentos fueron trasladados a la residencia de la exdirigente nacional de Fuerza Popular, y persona de confianza de Keiko Fujimori, Ana Herz de Vega, y que en dicho lugar los papeles fueron incinerados porque supuestamente comprometían las actividades de la organización fujimorista.
“Todo documento que tenía el membrete de Fuerza Popular fue quemado. Los papeles comprometían a muchas personas”, dijo el aspirante a colaborador eficaz, uno de los 10 que ha solicitado el Equipo Especial Lava Jato para que sea aprobado por el juez Víctor Zúñiga Urday.
El aspirante a colaborador eficaz detalló que durante el allanamiento las autoridades no se dieron cuenta de que en el segundo piso había un archivo documentario, por lo que, al poco tiempo del retiro de las autoridades, procedieron a recogerlo y llevarlo a la casa de Ana Herz de Vega.
“Todo documento, especialmente el contable, fue eliminado”, dijo el aspirante a colaborador eficaz.
Documentos comprometedores
“Toda esa información contable implicaba especialmente a Érika Yoshiyama Koga, sobrina de Jaime Yoshiyama Tanaka, y a la extesorera del partido Adriana Tarazona Martínez. Los papeles fueron quemados en el parrillero de la vivienda de Ana Herz”, señaló.
“En la diligencia a la casa de Morochucos, en Surco, participó el fiscal adjunto Walter Villanueva Luicho. Por razones que desconozco, se fue del sitio sin allanar ese archivo histórico. Es entonces que el partido dispuso eliminar la documentación”, dijo.
A fin de corroborar lo manifestado por el testigo, el Equipo Especial citó a dos personas relacionadas con el hecho. Solo una asistió y confirmó la versión sobre la incineración de los documentos de Fuerza Popular. La segunda persona no se ha presentado a dar su testimonio, presuntamente por presión del partido fujimorista.
Personas de confianza
Las autoridades preguntaron: “¿Quiénes se encargaron de seleccionar los documentos que sería quemados?”. El aspirante a colaborador eficaz respondió: “Fueron delegadas dos personas de confianza del partido. Todos los papeles fueron llevados a una habitación y en ese lugar seleccionaron los documentos relevantes para quemarlos”.
“Adriana Tarazona y Érika Yoshiyama sabían todo de las cuentas del partido. Ya otros colaboradores eficaces han indicado que ellas trabajaban con Keiko Fujimori. Pero de las dos, Érika Yoshiyama era el cerebro de la contabilidad. La incineración de los documentos las beneficia directamente”, declaró el testigo.
El Equipo Especial Lava Jato corroboró que el aspirante a colaborador eficaz tenía acceso a la cúpula del partido, por lo que conocía la identidad de los que participaron en la destrucción de la evidencia incriminatoria que se ocultaba en el local de Morochucos, en Surco. Es en ese lugar precisamente donde el congresista Rolando Reátegui Flores declaró que por orden de Keiko Fujimori, Adriana Tarazona le entregó dinero en efectivo que luego el legislador fujimorista depositó en las cuentas del partido mediante falsos aportantes de la región San Martín.
El testimonio del aspirante a colaborador eficaz comprueba no solo que la cúpula de Fuerza Popular instruyó a sus integrantes a obstruir de distintas formas la acción de los fiscales sino también llegaron a disponer la destrucción de toda evidencia comprometedora.
Presiones
El testigo, que describió con mucho detalle la operación de incineración de los documentos contables del partido fujimorista, decidió acogerse a la colaboración eficaz después que llegó al convencimiento de que la dirigencia de Fuerza Popular lo había abandonado a su suerte. “Solo se ofreció asistencia legal al grupo del círculo de Keiko Fujimori, cuando al principio se dijo que todos recibirían ayuda. Incluso pidieron que nos autoinculpáramos para que ellos no fueran implicados. Nos mintieron”, declaró el testigo.
El aspirante a colaborador eficaz proporcionó a los fiscales del Equipo Especial Lava Jato correos electrónicos que intercambió con dos implicados en el caso, Vicente Silva Checa y Augusto Bedoya Cámere, entre otros. Un peritaje ordenado por las autoridades determinó la autenticidad de las comunicaciones privadas que confirmaban que el testigo era un allegado a la cúpula.
Las fuentes relacionadas al Equipo Especial Lava Jato ratificaron que la información proporcionada por el testigo había sido adecuadamente corroborada, por lo que solicitó al juez Víctor Zúñiga Urday que apruebe su petición de colaborador eficaz.
“La colaboración eficaz permitirá ofrecer al testigo las garantías necesarias para su integridad porque la información que ha proporcionado compromete gravemente a la cúpula de la organización política Fuerza Popular, y porque corrobora nuestra hipótesis de que una organización criminal se enquistó en el mencionado partido político”, indicaron las fuentes.
Las fuentes mencionaron que el aspirante a colaborador eficaz identificó a otras personas de la dirigencia del partido fujimorista que participaron de la operación de incineramiento, o tuvieron conocimiento del mismo.
Las autoridades consideran que las declaraciones del testigo animará a otros implicados a acogerse a la colaboración eficaz, un mecanismo legal cuya aplicación ha permitido obtener importantes progresos en el caso. (Con información de La República)
Caso Keiko: Fiscalía consigue 10 nuevos colaboradores eficaces