En India es usual ver a los hombres pasear cogidos de las manos o abrazados. Este gesto no significa que sean pareja, simplemente es una manera de abstraerse del gentío de las calles además de ser un símbolo de amistad.
En otros países asiáticos como China, Corea o Japón es muy frecuente hacer ruido al sorber la sopa, lo que para nuestra cultura se convierte en un gesto grosero e incluso incómodo. Sin embargo, si viajas al país del sol naciente y se te cae el moquillo… ¡Ni se te ocurra hacer ruido al sonarte la nariz en público! Si quieres eludir miradas de desaprobación, sal de la habitación o dale la espalda a tus acompañantes para limpiar tus fosas nasales. Y recuerda, ¡hazlo sigilosamente!
Si piensas buscar trabajo en Irlanda, Reino Unido o Estados Unidos, recuerda que siempre que vayas a mandar tu currículum no debes incluir ningún dato de carácter personal. El género, la fecha de nacimiento, el estado civil o incluso una foto son elementos que podrían resultar discriminatorios a la hora de seleccionar a un candidato.
Si asistes a una conferencia o a una clase en Alemania, no te sorprendas si al final de esta ves a los teutones golpeando con el puño las mesas y pupitres. En el país de la cerveza no se celebra una clase o ponencia magistral batiendo palmas, ¡estas están reservadas únicamente para el teatro y los conciertos!
Uno de los posibles orígenes de la costumbre de entrechocar las copas se remonta a la antigua Roma, cuando una de las formas más usuales de matar a los enemigos era envenenar su bebida. Para probar que lo que se iba a tomar era inocuo, era costumbre entrechocar vigorosamente las copas, de forma que parte del contenido de una pasara a la otra, por lo que ambas personas beberían lo mismo. Cuando el envenenamiento cayó en desuso, el chocar las copas quedó como recuerdo de ese ritual.
En las primeras fotos, las personas retratadas tenían que permanecer quietas casi quince minutos para no salir movidas.
Nombres y otras curiosidades
En el tema de los apellidos en España es especialmente curioso el caso de los que tienen su origen en la procedencia social. Por ejemplo, el apellido Expósito hace referencia a la exposición de los recién nacidos cuando se desconocía su procedencia. Es decir, eran niños abandonados por sus padres y en el orfanato se les ponía ese apellido
El caso de los dos apellidos que tienen en España y en los países latinos es algo poco frecuente. Los hispanos ponen primero el apellido del padre y después el de la madre, aunque los portugueses y brasileños ponen primero el de la madre. Pero desde hace algún tiempo. en España se puede inscribir a los hijos en el Registro Civil con los apellidos al revés de lo habitual; es decir, primero el de la madre y después el del padre.
Hay muchos apellidos hispanos con la terminación “ez”, como López, Martínez, Fernández, etc. Esta terminación significa “hijo de”. Parece que viene del idioma vasco o euskera y se introdujo en la Edad Media. Así López es hijo de Lope, Martínez es hijo de Martín y Fernández es hijo de Fernando.
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