El primer nacimiento por fertilización in vitro se produjo en el Instituto Materno Perinatal (exMaternidad). Parejas de bajos recursos económicos se pueden someter a técnicas de reproducción asistida de alta complejidad y tener de esta manera hijos.
La madre (33), a quien una infección anuló sus trompas de falopio, llegó al Servicio de Reproducción Humana el 2014, cuando la exMaternidad ya disponía de un equipo multidisciplinarios de biólogos, ginecólogos y enfermeras, entre otros especialistas capacitados fuera del país.
El jefe del referido servicio, Antonio Cipriano Bernuy, mencionó que la única manera cómo la paciente podía tener hijos era justamente mediante la fertilización in vitro.
Esta técnica permite que la fecundación se realice fuera del cuerpo de la madre cuando otros métodos de reproducción asistida no han funcionado.
«Hay que tener cuidado con la evolución del embarazo, por ejemplo en la nutrición, para que el embarazo lleguen bien hasta el final», señaló Cipriano, tras afirmar que otras cuatro mujeres intervenidas en el servicio también quedaron embarazadas.
Explicó que el tratamiento es intenso durante tres semanas, porque se brinda medicamentos a la futura madre y hay un control riguroso de las hormonas y con ecografías.
«Es un tremendo éxito. Hemos demostrado que se puede usar tecnología de alta complejidad en el Estado. El nacimiento de los dos bebés significa que el instituto puede asumir este tratamiento especializado que, además, es de alto costo en clínicas», detalló Cipriano Bernuy.
En la exMaternidad de Lima el costo promedio de los tratamientos por fertilidad asistida es 50% menor al de un establecimiento particular.
Según Cipriano Bernuy, en Perú hay unas 500 parejas que requieren el tratamiento de fertilidad in vitro y solo se atiende el 1 por ciento por diversas razones, entre ellas por el alto costo.
Foto: Maternidad de Lima.