Las manifestaciones en demanda de mayores salarios y mejores condiciones laborales y las acciones en favor y en contra de las políticas de los gobiernos enmarcan la conmemoración, este año, del Día Internacional del Trabajo en los países latinoamericanos.
CUBA
Desde el triunfo revolucionario en 1959, millones de cubanos asisten a las marchas convocadas por la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) en todo el país, junto a dirigentes sindicales, de organizaciones de masas, estudiantiles y de mujeres.
A los desfiles celebrados el pasado año en las 15 provincias de la isla acudieron más de 1.700 representantes de 251 organizaciones sindicales y demovimientos sociales y de solidaridad con la isla, procedentes de 68 países de todos los continentes.
La CTC ha llevado a cabo conmemoraciones desde el pasado 1 de abril y hasta el 5 de mayo.
Este año, el Secretariado Nacional de la central obrera indicó en su comunicado que «la CTC y sus sindicatos convocan a los trabajadores, sus familiares y a todo el pueblo a participar activamente en la celebración de la jornada por el 1 de Mayo, y a desfilar masivamente en las plazas, avenidas, poblados, bateyes, en todas las localidades, bajo el lema: Unidos en la Construcción del Socialismo.
Entre los participantes se anunció la presencia del personal de salud que combatió el ébola en África Occidental en los últimos meses, así como los cinco cubanos que regresaron a la isla en diciembre luego de cumplir 16 años de prisión en cárceles de Estados Unidos acusados de conspirar para cometer espionaje, y son calificados de «ejemplos de firmeza, intransigencia y fidelidad a la Revolución y a la Patria».
De acuerdo con la convocatoria, «sobran» razones para convertir la celebración en la «festividad de cada cubano trabajador» y llamó a expresar en los desfiles el compromiso «irrestricto» con Venezuela, y «con los pueblos de nuestra América y del mundo que defienden su soberanía e independencia».
BRASIL
En Brasil, el 1 de mayo es conmemorado desde 1895, si bien sólo pasó a ser una fecha festiva en 1925, cuando el entonces presidente Artur Bernardes siguió el ejemplo de muchos países europeos y lo declaró como el Día del Trabajador.
No obstante, quien popularizó el día fue Getúlio Vargas, que instauró las fiestas populares, desfiles y celebraciones en la citada fecha.
El movimiento sindical fue apropiándose del 1 de mayo, hasta el punto de que aún hoy, la Fuerza Sindical (organización que engloba los sindicatos de varios sectores, vinculada a partidos de izquierda y una de las principales del país) realiza grandes fiestas y eventos en todo el país, con conciertos y hasta sorteos de casas propias.
Actualmente, los gobiernos brasileños han adoptado la costumbre de aprovechar el 1 de mayo para anunciar aumentos del salario mínimo y mejoras en las leyes laborales.
Con manifestaciones en las principales ciudades del país, el 1 de mayo tiene especial fuerza en Sao Paulo, la mayor urbe brasileña y en cuya área metropolitana están instaladas las principales industrias del país. Cada año, miles de trabajadores salen a las calles de la ciudad paulista para celebrar el Día del Trabajador.
La fecha ha ganado importancia además desde la llegada al poder del Partido de los Trabajadores (PT) en 2003, primero con Lula da Silva (2003-2010) y después con la presidenta Dilma Rousseff, al tener la formación política un pasado vinculado a los movimientos sindicales.
BOLIVIA
Como ha sido una dinámica en el gobierno del presidente de Bolivia, Evo Morales, el 1 de mayo se darán a conocer medidas en favor de los trabajadores. En esta oportunidad son dos decretos de incremento salariales del 8,5 por ciento al haber básico y del 15 por ciento al Salario Mínimo Nacional (SMN).
«El gobierno de Bolivia, a la cabeza del presidente Evo Morales, se ha caracterizado por darle importantes beneficios a los trabajadores en la parte de la legalidad, incrementos salariales, estabilidad, entre otros temas», aseguró el viceministro de Presupuesto y Contabilidad Fiscal, Jaime Durán.
A partir de mayo, el salario mínimo será de 1.656 bolivianos (238 dólares) con el 15 por ciento de aumento. Actualmente es de 1.440 bolivianos (207 dólares).
Los decretos abarcarán a los trabajadores municipales y de las universidades públicas, ya que en otras gestiones no se aplicaba a todos los sectores.
Desde que inicio de la primera gestión en 2006 hasta mayo 2014, Morales ejecutó una serie de anuncios en favor de los trabajadores, como la nacionalización de los hidrocarburos, de las empresas estratégicas de los hidrocarburos, leyes aprobadas y medidas en favor de los sindicalistas.
ARGENTINA
El 1 de mayo, Día Internacional del Trabajo, volverá a mostrar conmemoraciones divididas en la Argentina, con festejos separados según la mayor o menor cercanía de los organizadores frente al gobierno de la presidenta Cristina Fernández.
El Frente de Izquierda y de los Trabajadores y el Partido de los Trabajadores Socialistas harán una manifestación en la tradicional Plaza de Mayo, frente a la Casa de Gobierno, mañana viernes bajo la consigna «es un día de lucha, no de fiesta. Es un día para homenajear a nuestros mártires, recordar la historia de la clase obrera y repasar la situación actual».
Reclamarán por «el fin de la precarización laboral, los contratos temporarios y el trabajo en negro» y en pos de «fortalecer una alternativa política independiente de los patrones y de sus partidos».
En cambio, la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) y la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo (CNCT), ambas cercanas a la presidenta, celebrarán este jueves, en el estadio Luna Park: «Acompañamos el proyecto nacional y popular que promueve la industrialización con inclusión y trabajo digno para todos», explicaron.
URUGUAY
Los sindicatos en Uruguay exigirán aumentos de salarios superiores a la inflación (7,55 por ciento) privilegiando a los sueldos «sumergidos», que mantienen una alta incidencia en la economía local, lo que promete generar choques con el gobierno.
La reivindicación que plantearán el próximo 1 de mayo se da en vísperas de los Consejos de Salarios, donde trabajadores y empresarios acuerdan convenios laborales de largo plazo.
Y, además, cuando el gobierno del presidente Tabaré Vázquez, que asumió el 1 de marzo, planifica su Presupuesto Quinquenal, que regirá los gastos oficiales para el periodo 2015-2020.
La central única de trabajadores, el Pit-Cnt, reclamará «mantener la indexación (suba salarial por inflación)» que «garantiza mantenimiento del salario real», anunció el dirigente sindical, Richard Read.
El Pit-Cnt solicitará privilegiar un incremento para los «sueldos sumergidos» y del Salario Mínimo Nacional.
VENEZUELA
Cada 1 de mayo los venezolanos festejan el Día Internacional de los Trabajadores con marchas llenas de alegría y compromiso con un gobierno que durante 16 años consecutivos ha reivindicado a la clase obrera y la ha ubicado al frente de la construcción de un nuevo modelo económico, político y social.
Otro de los motivos que desatan el júbilo característico de la jornada es el anuncio del presidente Nicolás Maduro de decretar un aumento salarial. Actualmente la bonificación mínima de los trabajadores venezolanos tanto del sector público como privado es de 5.622 (892 dólares a cambio oficial) tras aprobarse en enero pasado un aumento.
Cada 1 de mayo la clase obrera venezolana se concentra en plazas, parques y espacios abiertos de todo el territorio nacional para manifestar su respaldo al proyecto bolivariano que por más de una década ha visibilizado, reconocido y reivindicado a los trabajadores de este país.
CHILE
El movimiento obrero de Chile se apresta a celebrar el Día Internacional de los Trabajadores en momentos en que el gobierno de la presidenta Michelle Bachelet impulsa una profunda Reforma Laboral, que cuenta con el apoyo de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT).
Esa organización, con una larga tradicional de lucha, ha logrado constituir a la Reforma Laboral en un tema de la agenda nacional y un punto imposible de desatender en el debate político nacional y ha decidido dedicarle este «Primero de Mayo unitario y masivo».
La CUT realizará como todos los años una masiva movilización nacional para conmemorar ese día e instalar la necesidad de avanzar en la Reforma Laboral que devuelva poder al sindicalismo y en una Nueva Constitución de Chile, en sustitución de la promulgada por el régimen militar de Augusto Pinochet (1973-1990).
Bajo el lema «Reforma Laboral, Más Democracia; Nueva Constitución, Mejor Chile», la CUT ha convocado a todas sus filiales a movilizarse masiva y activamente este 1º de mayo, con actividades en todo el país.
En Chile, el debate se ha instalado en la sociedad y tiene como fin el fortalecer el sindicato como único instrumento negociador; eliminar el reemplazo en la huelga en las empresas, en cumplimiento del convenio 87 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT); y lograr mejores condiciones para los trabajadores.
Aunque la CUT apoya la Reforma Laboral, ha dejado claro que su rol es de ser contraparte frente al gobierno, «lo cual no se hipoteca por tener legítima opinión y posición en el futuro de Chile».
NICARAGUA
Las centrales obreras en Nicaragua celebrarán el Día internacional del Trabajo en actos públicos por separado. En un lado los sindicatos afiliados a la Central Sandinista de Trabajadores (CST) y al Frente Nacional de los Trabajadores (FNT), ambos de afiliación sandinista y, por el otro, el Congreso Permanente de los Trabajadores (CPT), social demócrata.
Los sindicatos sandinistas (la CST, se encuentra actualmente dividida) son convocados por celebrar el primero de mayo, en un acto público que, por lo general, se realiza este último día de abril.
Los sindicatos sandinistas afiliados a la Centra Sandinista de Trabajadores (CST) y la Central Sandinista de Trabajadores-José Benito Escobar (CST-JBT) convocan a «sus masas» a un acto público en la Plaza de las Victorias que, por lo general, es presidido por el presidente, Daniel Ortega y su esposa, Rosario Murillo.
El Congreso Permanente de los Trabajadores, por su parte, convoca a marchas callejeras y discursos de corte tradicional en el que abundan las demandas al gobierno por mejores condiciones laborales.
