El actor cinematográfico Leonardo DiCaprio tendrá que ir a juicio para declarar por dar vida al estafador Jordan Belfort en la película ‘El lobo de Wall Street’, según ordenó el juez del Tribunal de Long Island (Nueva York) hoy jueves.
Pero el conflicto legal no guarda relación con Belfort, sino que tiene que ver con la demanda que uno de los extrabajadores del estafador interpuso a la productora por injurias y calumnias a finales del año pasado, según The Hollywood Reporter.
Se trata de Andrew Greene, uno de los subordinados del corredor de Bolsa, que asegura que uno de los personajes está inspirado en él y que este refleja una imagen suya de “borracho y degenerado”.
El demandante asegura que el personaje de la película Nicky Rugrat Koskoff es una caricatura suya que “sobrepasa los límites de lo permisible” y ha dañado su reputación, por lo que exige una indemnización de unos 13 millones de euros a varias productoras de Hollywood, entre ellas Appian Way, la empresa del propio DiCaprio.
Los abogados de la productora alegan que el personaje de Koskoff se basó en varias personas –y no sólo en el demandante, Andrew Greene– que rodeaban a Jordan Belfort.
El estafador al que interpreta en la película Di Caprio, en la vida real estaba al mando de la compañía Stratton Oakmont, a través de las que estafó millones de dólares a sus clientes. El demandante Greene se encontraba en el consejo de administración.
La defensa de Di Caprio había argumentado que el director Martin Scorsese y el guionista Terence Winter ya habían prestado testimonio ante el juez en este caso. Pero las autoridades federales están investigando el origen del dinero con el que Red Granite, otra de las productoras, financió la película.