El Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial de la Cámara de Comercio de Lima proyectó que el Producto Bruto Interno (PBI) peruano se situará en 2,7% en 2015 y 3,0% en 2016, impulsado por las actividades primarias.
«La economía peruana continúa en una fase de desaceleración económica y las proyecciones para el bienio 2015-2016 están supeditadas a la evolución de las expectativas de las empresas (inversiones) y consumidores, las exportaciones, así como del impacto del fenómeno El Niño, que afectará transversalmente al sector primario, construcción y comercio», señaló César Peñaranda Castañeda, director ejecutivo del IEDEP de la Cámara de Comercio de Lima, en la presentación de las «Perspectivas para el planeamiento 2016».
Peñaranda Castañeda afirmó que la proyección económica para este año sería ligeramente superior a 2014 (2,4 por ciento), liderada principalmente por los sectores pesca (17,2 por ciento) y minería (4,9 por ciento); también aportarán electricidad y agua (4,7 por ciento) y servicios (5,1 por ciento); este último con alta ponderación en el cálculo del Producto Bruto Interno peruano. El director ejecutivo del IEDEP señaló que el sector manufactura tendría un bajo incremento de 0,4 por ciento, afectado principalmente por el subsector no primario, dependiente de los precios de los commodities.
Por otra parte, el sector comercio registraría una expansión de 3,9 por ciento a la par de la desaceleración del consumo privado, y el sector construcción tendría una variación negativa de 3,9 por ciento al cierre de 2015. Con estos resultados, la tasa de crecimiento promedio del PIB en los dos últimos años (2014-2015) se ubicaría en 2,5 por ciento, ostensiblemente menor al 5,9 por ciento del período 2012-2013. Asimismo, el crecimiento del PIB proyectado para 2016 será por el aporte de los mismos sectores productivos que impulsarán la economía en el presente año: pesca (9,5 por ciento), minería (5,0 por ciento), electricidad y agua (4,8 por ciento) y servicios (4,7 por ciento).
No obstante, las proyecciones de crecimiento 2015-2016 de 2,7 y 3,0 por ciento, respectivamente, serán menores al crecimiento potencial (4.7 por ciento) debido a la baja inversión privada y pública, así como a la menor productividad y competitividad del país.
IEDEP estimó que para este año, la demanda interna tendrá un crecimiento de 2,7 por ciento y el consumo privado de sólo 3,7 por ciento, la tasa más baja que se ha registrado en la última década, exceptuando 2009 (2,8 por ciento), año de la crisis financiera internacional.
Pero para el 2016 se estima que la demanda interna se expandirá 3,2 por ciento y el consumo privado repuntará a cuatro por ciento. «En lo que respecta a la inversión privada, 2015 registraría una caída por segundo año consecutivo (-2,7 por ciento), mientras que para el 2016 se expandiría 2,1 por ciento», anotó César Peñaranda.
Fuente: bizusaperu.com