QUITO (Ecuador).– Un total de noventa ciudadanos venezolanos regresarán este martes desde la capital ecuatoriana, Quito, hasta su país tras haberse acogido al plan «Vuelta a la Patria» impulsado por el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
Según el encargado de negocios de la Embajada de Venezuela en Ecuador, Pedro Sassone, se trata del viaje número 32, al que se sumará uno más programado para mañana, con igual número de ciudadanos de su país que hasta ahora han residido en la ciudad costera de Guayaquil (suroeste).
El encargado de negocios de la Embajada protestó en una rueda de prensa que muchas veces se han encontrado con contratiempos a la hora de efectuar los vuelos, como ocurrió con el de hoy, que recibió la clasificación de vuelo chárter y argumentó que debería recibir una diferente porque el Gobierno venezolano no obtiene ningún beneficio económico con estos vuelos.
Sassone asegura que se trata de «vuelos humanitarios» porque «volver a la patria es un derecho».
El encargado de negocios explicó que, con los vuelos de esta semana, la cifra de venezolanos que han regresado desde Ecuador en la administración de Maduro bordea los 3,000, mientras que tiene peticiones de unas 1,500 personas más que residen tanto en Quito como en Guayaquil.
Argumentó que este plan es necesario porque los estudios de la Embajada demuestran que muchos de los venezolanos que emigraron no han cumplido sus expectativas económicas de conseguir un trabajo digno y protegido por las leyes laborales.
«El plan ‘Vuelta a la Patria’ es un compromiso con los venezolanos, con nuestra gente, con los compatriotas que expresan su deseo voluntariamente de volver a Venezuela», anotó.
Según Sassone, el programa «Vuelta a la Patria» incluye un plan de protección social que brinda asistencia sanitaria para aquellos que regresan con problemas de salud, así como también una pensión especial para la reactivación e inserción económica productiva «porque muchas personas dejaron su empleo y su carrera profesional y hay que planificar cómo se va a retomar todo eso».
Ulises Peroza, uno de los noventa venezolanos que viajan hoy y que deja a su hijo David trabajando en Ecuador, comentó a Efe que volvía a casa porque «es su patria y la añora».
Peroza definió su estancia en Ecuador como «buena, sin problemas», pero decidió que quiere volver para reencontrarse con su familia y para conocer a sus nietos.
«Espero encontrar lo que cualquiera se imagina, pero espero encontrar también (a su regreso) a mi gente linda y espero que lleguemos a una solución para lo que está pasando», deseó al añadir: «quiero aportar mi granito de arena para que volvamos a ser lo que siempre hemos sido, un gran país».
Tras vivir medio año en Ecuador, Geovanny Rodríguez, explicó a Efe que vuelve a casa porque, aunque sus parientes le cuentan que la situación en Venezuela «no está nada fácil», prefiere estar allí con su familia y porque en Ecuador se ha encontrado que «el trato es muy difícil para el venezolano».
Rodríguez explicó que aquí le han «robado» tanto a él como a su sobrino y que no ha tenido recursos «para poder pagar el arriendo» del departamento en el que vive.
Una vez en Venezuela, no ha decidido si se quedará o emigrará nuevamente a otro país donde, en su opinión, «no exista tanta xenofobia»
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