QUITO (Ecuador).- Vecinos de un centro comercial en la capital de Ecuador sintieron disparos hoy cuando un guardia de seguridad intentaba detener a un asaltante, mientras que en otro punto de la ciudad explotó una bomba molotov cerca de un mercado.
Directivos de la institución comercial aclararon que no hubo un tiroteo dentro del inmueble, ubicado en el noroccidente de la urbe, sino que uno de los vigilantes de los parqueos resultó herido de bala cuando intentó detener a un delincuente, quien huía tras asaltar a un peatón.
Este suceso ocurrió horas después de que ciudadanos reportaran en redes sociales la explosión de una bomba molotov en el estacionamiento del mercado de Carapungo, en otra zona también del norte de la capital.
Hace unos días detonaron dos coches-bomba, uno de ellos cerca de la sede del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI).
En otras localidades como Cuenca, Pasaje y Machala, en el sur, también se registraron detonaciones en la vía pública.
Según la tesis del Gobierno, las organizaciones criminales buscan amedrentar al Estado para evitar que siga cumpliendo con las funciones que tienen las Fuerzas Armadas y la Policía de controlar los centros penitenciarios, en los cuales las bandas buscan mantener el control.
A eso se suma que la candidata a la presidencia, Luisa González, de la Revolución Ciudadana, denunció que recibió amenazas de muerte.
La escalada de la inseguridad en Ecuador cobró en el 2022 la vida a más de cuatro mil 500 personas y el número de muertes violentas se perfila mayor en el 2023 si la tendencia continúa como hasta ahora, estiman especialistas.
Fuente y foto Prensa Latina
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