WASHINGTON.- El déficit presupuestario de EEUU llegará este año fiscal a 544,000 millones de dólares, equivalente a un 2.9 % del producto interior bruto (PIB), el primer aumento desde el 2009, indicó la Oficina Presupuestaria del Congreso (CBO).
La cifra es superior a los 439,000 millones de déficit presupuestario registrado el pasado año, que suponía el 2.5 % del PIB, y fue el más bajo desde el 2007.
De este modo se marcará un cambio de tendencia respecto al sostenido descenso del desequilibrio en las cuentas públicas en EEUU desde que se alcanzó el pico del 9.8 % del PIB el 2009, en plena recesión económica tras el estallido de la crisis financiera.
El año fiscal 2016, que comenzó en octubre pasado, concluye en septiembre.
Como principal responsable del alza en el déficit, la CBO, un órgano no partidista, menciona el acuerdo presupuestario de 680,000 millones de dólares para la próxima década lograda el pasado año entre el presidente estadounidense Barack Obama y los líderes republicanos en el Congreso, que incluye un aumento en el gasto público y recortes de impuestos para empresas y familias.
Aunque la mayoría de los analistas no considera un problema un déficit de en torno al 3 %, la CBO advirtió que de mantenerse los niveles actuales, el déficit superará el 5 % del PIB en los próximos 10 años, cifra que «tendría graves consecuencias negativas para el país».
El reporte semestral también prevé una progresiva ralentización de la economía estadounidense, que cerrará el 2016 con un crecimiento del 2.7 %, frente al 3 % estimado en agosto, y será del 2.5 % el 2017 y del 2 % entre el 2018 y 2020.