FORT LAUDERDALE.- Con uniforme naranja, Nikolas Cruz, el tirador que mató a 17 personas en una escuela de Parkland, este lunes compareció ante la corte, en su primera aparición pública desde que fue detenido sin derecho a fianza por asesinato premeditado.
El homicida múltiple de 19 años, se sentó con la cabeza gacha durante la audiencia ante la jueza Elizabeth Scherer, en la que se trató si se debe desbloquear una moción de la defensa relacionada con el acceso a su cliente.
Cruz ha sido acusado de 17 cargos de asesinato premeditado, por cada uno de los estudiantes y trabajadores que murieron el miércoles durante un tiroteo en la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas de Parkland, en Florida.
Quedó en custodia sin derecho a fianza en la audiencia del jueves, después de haber sido arrestado el día del tiroteo.
Después de amenazar en videos con perpetrar una masacre el adolescente fue capaz de comprar un rifle de asalto AR-15, pese a las numerosas alertas que recibieron varias agencias -incluido el FBI.
Trascendió que su perfil es el de un joven con muchos problemas, que había sido expulsado de la escuela el año pasado por «razones disciplinarias».
Su madre adoptiva murió en noviembre y desde entonces vivía con la familia de un compañero de la escuela. Los padres de este amigo dijeron en entrevistas que no tenían idea de sus tendencias violentas.
«Le dije que habría reglas y las siguió a rajatabla», declaró al diario Sun Sentinel. James Snead, un veterano del Ejército y experto en inteligencia militar, de 48 años.
«Teníamos a este monstruo en casa y no lo sabíamos», agregó, de su lado, Kimberly Snead, una enfermera de 49 años. «No vimos este lado de él». (ECHA- Agencias)