FLORIDA.- Gracias a su traje de exo esqueleto, el estudiante venezolano, Aldo Amenta, quien quedó parapléjico al fracturarse el cuello en una piscina, pudo abandonar momentáneamente su silla de ruedas y pudo caminar para recibir su título de ingeniero eléctrico, ante el aplauso conmovido de los asistentes.
Esta emotiva graduación se registró en la Universidad Internacional de la Florida (FIU) cuando el joven venezolano, parapléjico desde el 2015, se levantó de su silla de ruedas y dio varios pasos, sonriente y desplazándose mecánicamente como un robot.
Mark B. Rosenberg , rector de la Universidad , celebró emocionado la tenacidad de Aldo Amenta al caminar en la ceremonia de graduación para recibir su título de ingeniero.
En situaciones como esa «te vienen muchas cosas negativas a la cabeza», le dijo Amenta a CBS News. Entre ellas, que no iba a poder graduarse.
Pudo hacerlo gracias a una voluntad extraordinaria de reponerse, y a un aparato capaz de sostener su cuerpo a medida que vuelve a dar sus primeros pasos: un exoesqueleto con el que viene entrenándose hace casi un año.
Después de dos meses en el hospital, Amenta y su familia iniciaron un proceso de recuperación que se concentraba en su salud y, al menos momentáneamente, ponía a un lado la carrera universitaria. Pero esa decisión implicaba un problema: si no estudiaba en FIU, podrían retirarle la visa de estudiante y perder su estatus legal en Estados Unidos.