NUEVA YORK.- El expresidente Bill Clinton visitará la semana próxima El Salvador, Panamá y Perú en un viaje de tres días dirigido a conocer de primera mano el avance de varias iniciativas de su fundación en comunidades pobres.
La Asociación Empresarial Clinton Giustra (CGEP) ha desarrollado varios proyectos en América Latina y el Caribe con el fin de fomentar el desarrollo económico sostenible y ayudar a la población a encontrar un camino para salir de la pobreza, centrándose en aumentar las oportunidades para las niñas y las mujeres.
La primera parada de la gira será El Salvador, donde el lunes 9 visitará la granja de dos agricultores que participan de la iniciativa Acceso Oferta Local, lanzada hace dos años y medio, para ayudar al sector agropecuario.
Giustra Enterprise Partnership (CGEP) compra a precios justos los productos de los agricultores del programa y los vende a la mayor cadena de supermercados de El Salvador.
A través de este programa los agricultores reciben capacitación en las mejores prácticas agrícolas y se asegura de que tengan acceso a semillas y fertilizantes de calidad.
El expresidente quiere escuchar a los agricultores y sus familias sobre su experiencia con el programa, que los lleva a generar más ingresos, y el impacto que ha tenido la iniciativa de suministro de alimentos.
En Panamá, el expresidente inaugurará el martes el parque eólico de Coclé, como resultado de un compromiso hecho el 2013 por una compañía que invirtió 100 millones de dólares en la Iniciativa Global Clinton para América Latina.
Después de la ceremonia, Clinton realizará una gira por el parque para conocer detalles de la construcción, sus beneficios ambientales y del ahorro de costos asociados a la energía renovable.
En el Perú, donde llegará el miércoles, visitará en la empresa de distribución Chakipi para ver el progreso de un programa dirigido a ayudar a mujeres de escasos recursos, del que ya hay unas 900 beneficiarias en diversas regiones, según Gunton.
Agregó que en el Perú la inversión es de unos dos millones de dólares.
Por medio de esta iniciativa, las mujeres reciben formación en destrezas de venta y en productos esenciales a precios reducidos, como los alimentos envasados, artículos de cuidado personal, del hogar y lámparas solares, que luego venden en sus comunidades.
Clinton quiere conocer cómo las mujeres seleccionan sus productos y cómo esta iniciativa ha impactado sus vidas y las de sus familias. Este modelo de distribución fue puesto en marcha recientemente en Haití, explicó Guton.