WASHINGTON.- Representantes del Departamento de Estado de Estados Unidos reconocieron hoy seguir perplejos ante los misteriosos ataques sufridos por miembros de la misión diplomática estadounidense en Cuba y admitieron no saber qué o quién puede estar detrás de semejante constelación de síntomas.
«No existe un mecanismo obvio que nosotros conozcamos que pueda provocar estas lesiones (…). No hay nada igual en la literatura médica tradicional, son una constelación de síntomas única sin una causa obvia», declaró el doctor Charles Rosenfarb, director de la Oficina de Servicios Médicos del Departamento de Estado.
Rosenfarb fue uno de los cuatro representantes de la cartera de Exteriores estadounidense que compareció hoy en el subcomité de Asuntos Exteriores para el Hemisferio Occidental de la Cámara de Representantes, ante el cual todos coincidieron en referirse a los ataques como un «misterio».
Estos presuntos ataques, que fueron tildados inicialmente de acústicos, tuvieron lugar entre 2016 y 2017 y afectaron a 26 funcionarios estadounidenses.
Como consecuencia de esta situación, Washington decidió reducir su misión diplomática en Cuba de 50 miembros a los apenas 18 que a día de hoy permanecen en la isla, si bien por el momento las autoridades estadounidenses no se plantean cerrar la embajada.
«El Departamento continuará promoviendo un país estable y libre para el pueblo cubano, incluso con su personal reducido. De hecho, ese es el principal motivo por el que mantenemos nuestra presencia allí, para progresar en esos dos objetivos», sostuvo Kenneth Merten, subsecretario de Estado interino para el Hemisferio Occidental.
Hasta la fecha, las autoridades cubanas han negado categóricamente estar detrás o tener conocimiento de los ataques y aseguran no haber encontrado pruebas de estas supuestas agresiones en sus pesquisas.
«Respecto a los misteriosos ataques, cabe señalar que nuestra investigación sigue en marcha. Aún hay mucho que desconocemos, incluido quién y qué está detrás de las lesiones de nuestros colegas», concluyó Merten.
EFE/Foto: cbadebate.cu