WASHINGTON/EEUU.- El juez Anthony Kennedy, de 81 años, este miércoles anunció que se jubilaría, abriendo camino para que el presidente Donald Trump nomine al sucesor y una batalla entre conservadores y liberales para controlar el máximo tribunal en Estados Unidos.
“El juez Kennedy informó hoy a sus colegas que está presentando al Presidente una notificación formal de su decisión, efectiva a partir del 31 de julio de este año, para dejar el estado activo como un Juez Asociado y para asumir el estatus de superior“, informó la Corte en un comunicado.
La institución citó las palabras del impartidor de justicia: “Ha sido el más grande honor y privilegio servir a nuestra nación en la judicatura federal durante 43 años, 30 de esos años en la Corte Suprema”.
Agregó que su decisión de hacerse a un lado se basó en su profundo deseo de pasar más tiempo con su familia.
Esta renuncia abrirá la batalla sobre la dirección que seguirá la Corte Suprema, dado que el mandatario republicano buscaría un sucesor que siga su agenda conservadora.
Un representante de Trump muy probablemente crearía una sólida mayoría conservadora de cinco miembros que podría poner en peligro los derechos de aborto y ampliar los de armas, entre otros temas.
El récord de votos del juez Kennedy fue moderadamente conservador, que incluye su apoyo en los casos sobre la Segunda Enmienda y los derechos de voto pero también fue el principal defensor de los derechos de los homosexuales y se unió a los liberales en casos de aborto, acción afirmativa y pena de muerte.
El juez Anthony Kennedy fue nombrado para la Corte Suprema de Justicia por el expresidente de EEUU, Ronald Reagan en 1988.
El reemplazo de Kennedy podría tardar meses, tras la experiencia que vivió el expresidente Barack Obama, tras el fallecimiento del juez Antonin Scalia, en febrero del 2016.
Fue hasta el 2017 que el presidente Trump logró colocar al juez Neil Gorsuch.
Kennedy anunció su retiro en una carta dirigida al presidente Trump, informó USA Today, y a la sesión de la Corte de este miércoles acudieron su esposa Mary y varios miembros de su familia. (ECHA – Agencias)