VIRGINIA.- Un jurado este martes declaró culpable de múltiples cargos por fraude a Paul Manafort, el ex jefe de campaña electoral del ahora presidente de EEUU, Donald Trump, en un proceso por el que podría pasar el resto de su vida en prisión.
Manafort fue declarado culpable de 8 de los 18 delitos por fraude que le imputaba el fiscal especial para la trama rusa, Robert Mueller, después de que un jurado en el tribunal federal del Distrito de Virginia Este así lo decidiera.
De acuerdo con la cadena CNN, los 12 miembros del panel encargado de llegar a un veredicto en el juicio que ha tenido como sede a la ciudad de Alexandria, Virginia, determinó que el acusado es responsable de cinco cargos de fraude fiscal, uno por esconder cuentas bancarias en el extranjero, y otros dos por fraude bancario.
Thomas Ellis III, el juez encargado del caso, declaró un juicio nulo para la otra decena de imputaciones debido a que el jurado no pudo llegar a un veredicto unánime en esos casos.
Este juicio es resultado de la investigación del fiscal especial Robert Mueller sobre la presunta interferencia electoral rusa en 2016 y una supuesta complicidad con la campaña de Trump, aunque las acusaciones no tienen que ver con el tiempo que el imputado estuvo en el equipo del presidente.
Manafort se había declarado inocente de todos los cargos en su contra, correspondientes a una etapa previa a la campaña en la que trabajó para políticos ucranianos.
El presidente Donald Trump tenía plena confianza en su entonces jefe de campaña electoral, Paul Manafort, hallado culpable de fraude por un jurado de la corte federal de Virginia.
Durante el proceso judicial los fiscales calificaron al exasesor del jefe de la Casa Blanca como un mentiroso que organizó por años un esquema para ocultar millones de dólares en 31 cuentas extranjeras y obtener millones más en una serie de préstamos bancarios fraudulentos.
Según la parte acusadora, el testigo estrella del juicio no fue el exsocio y antiguo protegido de Manafort, Rick Gates, quien declaró ampliamente en su contra, sino la gran cantidad de documentos presentados como evidencia de los crímenes.
Gates emitió un testimonio muy incriminatorio, pero también afirmó que robó dinero de su exjefe y su credibilidad fue continuamente atacada por los abogados de la defensa, tanto por ese tema como por reconocer que sostuvo relaciones extramatrimoniales.
Los letrados del exjefe de campaña desafiaron enérgicamente las conclusiones de la fiscalía y alegaron que el Gobierno había participado en un enjuiciamiento ‘selectivo’.
Tal era el desespero por presentar un caso contra Manafort, que llegaron a un acuerdo con Rick Gates, argumentó el abogado Kevin Downing en referencia a que este se declaró culpable de conspiración y mentir a las autoridades como parte de un pacto para testificar.
Según varias fuentes, si el excolaborador de Trump era hallado culpable, los fiscales tendrían una poderosa influencia para intentar que testifique ante un gran jurado sobre si sabe de cualquier trato impropio entre la campaña del presidente y Rusia. (ECHA- Agencias)