WASHINGTON.- La legalización del matrimonio gay en todo Estados Unidos, que hoy estudia el Tribunal Supremo del país, desató opiniones encontradas en la escena política, donde los candidatos a ocupar la Casa Blanca el 2016 aprovecharon para expresar sus puntos de vista.
«Toda pareja enamorada y su familia merece ser reconocida y tratada igual por la ley en toda nuestra nación», afirmó la aspirante a la candidatura demócrata a la Presidencia Hillary Clinton, que tiñó de los colores del arcoíris su logo de campaña, normalmente azul y rojo y compuesto por una H y una flecha.
La exsecretaria de Estado y exprimera dama, que ya expresó en los últimos años su apoyo al matrimonio entre homosexuales, estaba en la Casa Blanca cuando, en 1996, su marido Bill Clinton firmó la Ley de Defensa del Matrimonio (DOMA, en inglés), que lo definía como «la unión entre un hombre y una mujer».
Hace 22 meses, el Supremo echó abajo esta definición, aunque no entró en si los estados tienen poder para impedir las uniones entre personas del mismo sexo, tema sobre el que la máxima instancia judicial del país emitirá un veredicto en junio tras escuchar argumentos a favor y en contra en la audiencia de hoy.
Además, en su cuenta de Youtube, el equipo de campaña de Clinton colgó un vídeo en el que se ve a la exprimera dama escuchando a un abuelo, identificado como Mike Yowell, en una cafetería de Iowa, la primera parada de su campaña presidencial.
«Me emocioné cuando urgió al Supremo a pronunciarse a favor de la igualdad en el matrimonio homosexual. Sentí como ‘esa es nuestra chica'», dijo el hombre a Clinton, según figura en el vídeo.
En el otro lado de la bancada política, en el lado republicano, el exgobernador de Florida Jeb Bush, posible candidato a la Presidencia el 2016, dijo en respuesta a las preguntas de los periodistas durante un acto en San Juan (Puerto Rico), que asistirá a una boda de un amigo gay.
Entre las críticas más duras estuvo la del exsenador republicano de Pensilvania y excandidato presidencial Rick Santorum, en su cuenta de Twitter, en la que consideró más necesario cambiar el «corrupto» Servicio de Impuestos Internos (IRS) que la definición de matrimonio.
«Necesitamos eliminar el Obamacare (la reforma sanitaria impulsada por el presidente Barack Obama) y no la definición del matrimonio que la humanidad ha sostenido durante 5.000 años», añadió Santorum, de confesión católica, cuyo nombre se baraja para la carrera presidencial.
Sin embargo, las críticas más fuertes las pronunció este fin de semana el senador republicano Marco Rubio, que tachó de «ridículo y absurdo» creer que existe un derecho constitucional que proteja el matrimonio entre homosexuales y expresó su deseo de que ese enlace se defina en las leyes como «la unión entre un hombre y una mujer».
«No existe un derecho constitucional para el matrimonio homosexual«, aseguró Rubio, aspirante a ocupar la Casa Blanca, en una entrevista con el canal cristiano CBN. (EFE)