NUEVA YORK.- El estado de Nueva York vivió hoy el fervor final de las elecciones primarias de Estados Unidos y queda listo para una votación, la de este martes, que puede llegar a definir el futuro de la carrera hacia la Casa Blanca.
Las últimas encuestas confirman que, si se trata del voto de Nueva York, las opciones están claras: es la demócrata Hillary Clinton la favorita en Nueva York, y el magnate republicano Donald Trump no parece tener a nadie que le haga sombra en el estado.
Pero, en el bando demócrata, las preferencias a nivel nacional no están tan claras y, de hecho, la enorme distancia que separaba inicialmente a Clinton de su rival, el senador Bernie Sanders, cada día se estrecha más.
Un sondeo de The Wall Street Journal y la cadena NBC difundido hoy indica que la diferencia entre Clinton y Sanders ya es solo de dos puntos porcentuales; cuando ambos comenzaron su campaña electoral, en junio pasado, era de 60 puntos.
De hecho, Sanders, que se ha volcado a fondo en un estado en el que se nació y crió, aunque luego se fue a vivir a Vermont, llega a los comicios de Nueva York con más éxitos de los que ha cosechado recientemente Clinton.
En las votaciones primarias que ha habido desde el pasado 22 de marzo en distintos estados, siete han sido para Sanders y solo una, la de Arizona, para Clinton.
Pero, al margen de lo que digan las encuestas, la palabra final estará en los delegados que ha venido cosechando cada uno y que votarán según el mandato recibido cuando acudan a la convención en la que se elegirá el candidato presidencial.
Y en ese sentido es Clinton la que sobrepasa a Sanders, por 1,776 delegados a 1,125, incluyendo los llamados «superdelegados», o dirigentes del partido que, aunque no han recibido un mandato específico, se han pronunciado explícitamente por alguno de ellos.
En el bando republicano, el neoyorquino Trump sigue con una amplia diferencia a nivel nacional en los sondeos de opinión y en el número de delegados respecto a su inmediato seguidor, el senador por Texas Ted Cruz.
Y en Nueva York, Trump, según un último promedio de encuestas hecho por la cadena Fox, acumula el 53,1 % de las preferencias, más del doble de su inmediato seguidor en el estado, el gobernador de Ohio, John Kasich, con el 22,8 %.
Trump, que ha sabido cosechar odios y lealtades en Nueva York por sus posiciones radicales, está tan seguro de su victoria en esta ciudad que hoy quemó su último cartucho muy al norte, en Buffalo, cerca de la frontera con Canadá.
Horas antes, en la torre que lleva su nombre, en la ciudad de Nueva York, se reunió con un pequeño grupo de una asociación de minorías que lo apoya y volvió a insistir en que ganará con toda seguridad y que tiene el apoyo de «millones» de votantes.
En unas breves declaraciones recogidas por los medios locales, Trump defendió lo que viene repitiendo en su campaña: hacer de Estados Unidos una nación «grande» y con «fronteras seguras».
EFE/ Agustín de Gracia