MICHIGAN.- El obispo Charles H. Ellis III, predicador Pentecostal Apostólico de Detroit, rozó el pecho de la cantante , Ariana Grande, al rodearla con su brazo durante el funeral de Aretha Franklin, un acto que causó revuelo y que lo obligó a presentar sus disculpas.
Durante la honra póstuma, Ellis llamó a Ariana Grande para que dedicara unas palabras a la Reina del Soul desde el altar en el que él estaba situado y ahí rodeó a la cantante con su brazo derecho.
En el vídeo en el que aparece este momento, se aprecia cómo el pastor colocó su mano muy por encima de la cintura de la cantante, a la altura del pecho, y deliberadamente trató de rozar el pecho de Ariana Grande mientras bromeaba con ella.
https://twitter.com/justinstrongest/status/1035637241538863104?ref_src=twsrc%5Etfw%7Ctwcamp%5Etweetembed%7Ctwterm%5E1035637241538863104&ref_url=https%3A%2F%2Fwww.abc.es%2Fcultura%2Fmusica%2Fabci-obispo-funeral-aretha-franklin-desata-polemica-manosear-ariana-grande-201809021738_noticia.html
Este episodio desató la polémica en las redes sociales, especialmente en Twitter, donde la etiqueta #RespectAriana fue tendencia durante horas.
Tras la indignación generada, el obispo se ha disculpado por manosear a la joven cantante.
«Nunca sería mi intención tocar el pecho de ninguna mujer… No sé, supongo que la rodeé con el brazo», explicó Charles Ellis a la prensa estadounidense al asegurar que no tiene una explicación para lo ocurrido.
«Quizás crucé la frontera, tal vez fui demasiado amigable o familiar, pero nuevamente, me disculpo» insisti.
El comediante Trevor Noah, de amplia popularidad en Estados Unidos, fue uno de los primeros en denunciar la actitud del obispo Ellis hacia la cantante en su cuenta oficial de Twitter.
«¿Qué pasa con la mano del pastor?», se preguntó Noah en su tuit, en el que adjuntó un vídeo en el que se ve cómo la mano de Ellis se acerca al pecho de la joven cantante en repetidas ocasiones.
No obstante el obispo no fue el único que quedó señalado en este acto. Los usuarios de Twitter también delataron la actitud poco correcta del expresidente estadounidense Bill Clinton, quien no retiró la mirada en ningún momento de la artista de 25 años. (ECHA- Agencias)