WASHINGTON.- Los 12 países firmantes del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP), entre ellos EEUU y Japón, divulgaron hoy el texto completo del acuerdo comercial, justo un mes después del cierre de las negociaciones en la ciudad estadounidense de Atlanta.
El TPP está considerado como el más ambicioso acuerdo comercial jamás alcanzado porque los 12 países involucrados representan el 40 % de la economía mundial.
Del acuerdo, que debe ser aprobado en los parlamentos de las naciones firmantes para entrar en vigor, forman parten EEUU y Japón -primera y tercera economía mundial, respectivamente-, junto con Australia, Brunei, Canadá, Chile, Malasia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam.
Por la parte estadounidense, fue la Oficina de Comercio Exterior la encargada de divulgar el texto completo del TPP, que consta de 30 capítulos y más de 2.000 páginas.
La Casa Blanca y el propio presidente Barack Obama han destacado que el acuerdo será muy beneficioso para los exportadores estadounidenses, ya que unas 18.000 tasas arancelarias que enfrentan ahora se verán reducidas prácticamente a cero.
El TPP es un elemento clave de la política exterior de Obama, uno de cuyos objetivos es priorizar la relación con la región de Asia-Pacífico para hacer frente a la influencia de China, país que no forma parte del Acuerdo Transpacífico.
En esa región, «el reglamento está disponible. Y si no aprobamos este acuerdo, si EEUU no escribe estas reglas, entonces países como China lo harán», enfatizó Obama en un artículo publicado hoy en la plataforma digital Medium.
«En este momento, las reglas del comercio global ponen a nuestros trabajadores, negocios y valores en desventaja (…) El Acuerdo Transpacífico cambiará eso», argumentó el presidente.
En junio pasado, el Congreso estadounidense aprobó, gracias a la mayoría republicana, la ley conocida como «vía rápida», que otorga poderes especiales de negociación de tratados comerciales internacionales a Obama.
Gracias a esa ley, Obama podrá presentar al Congreso el TPP y los legisladores únicamente tendrán la capacidad de votar a favor o en contra del pacto, pero no de enmendar detalles o utilizar minorías de bloqueo.
Los defensores del TPP, entre ellos muchos republicanos, argumentan que este acuerdo abre nuevos mercados a los productos estadounidenses y eso repercutirá favorablemente en los trabajadores del país.
Frente a esto, numerosos congresistas demócratas y los sindicatos argumentan que el TPP generará pérdidas de empleos en EEUU en beneficio de países con salarios más bajos.
Los congresistas tienen 90 días para revisar el TPP y la votación sobre el pacto se espera, como pronto, para febrero del 2016, lo que coincidiría con el inicio de la temporada de primarias de los partidos de cara a las elecciones presidenciales de noviembre.