WASHINGTON– Tras el ataque terrorista en Texas, el Pentágono reforzó la seguridad de sus bases militares por precaución, dentro y fuera del país, frente a una eventual amenaza de los yihadistas del Estado Islámico.
El nivel de alerta se elevó a B en una escala de cinco que va de Normal a D, para que los militares implementen «una mayor vigilancia», precisó un vocero del Pentágono, tras una advertencia de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI).
Por su parte, el coronel Steve Warren aseguró que la última vez que el nivel de seguridad se elevó en las bases de Estados Unidos fue el 11 de septiembre de 2011, en la conmemoración de los diez años de los atentados contra el Pentágono y las torres del World Trade Center.
Ahora, la decisión fue tomada por el almirante Bill Gortney, el comandante militar responsable de la seguridad aérea de Estados Unidos y Canadá.
En la víspera, el secretario estadounidense de Defensa, Ashton Carter, indicó que el ataque contra un centro donde se realizaba un concurso de caricaturas de Mahoma en Texas, parece haber sido «inspirado» pero no «dirigido» por el Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés).
Ashton Carter rechazó categóricamente lo que definió como «conjeturas disparatadas» que circulan en internet de que las próximas maniobras militares en Texas son parte de una ocupación hostil del estado o alguna otra misión del Pentágono.(ECHA- Agencias)