WASHINGTON— En una contundente victoria para los “Dreamers”, el Tribunal Supremo de Justicia este lunes rechazó escuchar la apelación de la Administración Trump sobre un fallo a favor de DACA, dejando en pie la renovación de permisos que será más allá del próximo 5 de marzo.
La máxima corte del país llevaba varias semanas discutiendo a puerta cerrada cómo responder a una inusitada apelación de la Administración Trump para que se pronunciara de forma expedita sobre un fallo judicial en California el mes pasado que exigió continuar la renovación de permisos bajo el programa de Acción Diferida (DACA) de 2012.
Sin mucho detalle, el Tribunal Supremo explicó que “se supone que el tribunal de apelaciones actuará de forma expedita para decidir este caso”, informó el diario estadounidense La Opinión.
La esperada decisión de los nueve magistrados no sorprendió en círculos jurídicos debido a que en el pasado el Tribunal Supremo ha respondido a peticiones expeditas del gobierno sólo en un puñado casos excepcionales o una emergencia nacional.
El Tribunal Supremo tenía ante sí un abanico de posibilidades respecto a DACA, y aún si aceptaba a trámite la apelación del Departamento de Justicia, lo más probable es que la decisión final hubiese salido en junio próximo, o en su próxima sesión.
En declaraciones a la prensa, un portavoz del Departamento de Justicia, Devin O´Malley, dijo que aunque esperaba un resultado distinto, el Tribunal Supremo raras veces emite un fallo antes de que se pronuncie una corte de apelaciones.
Sin embargo, insistió en que la Administración continuará defendiendo “la autoridad legal” del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de desmantelar DACA “de forma ordenada”.
Mientras tanto, al inicio de una reunión con gobernadores sobre la violencia de las armas, el presidente Donald Trump nuevamente ridiculizó al Noveno Circuito de Apelaciones, que en el pasado ha emitido fallos favorables a los inmigrantes.
“Veremos qué pasará. Esa es mi actitud”, dijo Trump.
Casa Blanca se pronuncia
Poco antes, un portavoz de la Casa Blanca, Raj Shah, emitió una declaración en la que condenó el fallo del tribunal en California y dejó entrever que la Administración podría regresar al Tribunal Supremo.
“El programa DACA –que provee permisos de trabajo y un sinnúmero de beneficios del gobierno en masa para inmigrantes ilegales- es claramente ilegal”, y el fallo que permitió su reactivación “es una usurpación de autoridad legislativa”, argumentó Shah, repitiendo una falsa premisa de grupos ultraconservadores.
Según Shah, el fallo en cuestión, emitido mientras el Congreso debate el futuro del programa, deja en claro que el juez “intervino imprudentemente en el proceso legislativo”.
“Esperamos que este caso se escuche de forma expedita por el tribunal de apelaciones y, de ser necesario, ante el Tribunal Supremo, donde esperamos prevalecer plenamente”, aseguró Shah, hijo de inmigrantes.
El caso llegó hasta el Tribunal Supremo porque la Administración Trump impugnó el dictamen del juez federal William Alsup, en San Francisco (California), que el pasado 9 de enero condenó la forma en que ésta desmanteló DACA el pasado 5 de septiembre.
Aunque el caso debe ahora seguir su curso normal por el sistema judicial, la decisión del Tribunal Supremo da un respiro a los Dreamers, porque para efectos prácticos elimina la “fecha de vencimiento” de marzo.
En todo caso, era un plazo artificial porque ya antes del fallo de Alsup, las protecciones de DACA se mantienen en pie para los jóvenes indocumentados hasta que venzan sus permisos.
De esta forma, los Dreamers ya acogidos al programa implementado por la Administración Trump podrán continuar renovando sus permisos de dos años, que les permite trabajar, estudiar, o inscribirse en las Fuerzas Armadas.
Otro fallo judicial reciente, del juez federal Nicholas Garaufis, en Brooklyn (Nueva York), también exigió la continuidad de DACA para la renovación de permisos. (ECHA- Agencias)