EL CAIRO.- Al menos 162 emigrantes murieron en el naufragio de un barco el miércoles pasado en la costa mediterránea egipcia, en el que viajaban cientos de personas, según el último recuento efectuado hoy por el ministerio de Sanidad egipcio.
Sanidad explicó en su comunicado que seis personas rescatadas continúan hospitalizadas, algunas de ellas en coma y otras por roturas en las extremidades inferiores.
El gobernador de la provincia de Al Bahira, en cuyas costas se produjo la tragedia, Mohamed Sultan, indicó anteriormente que todos los cadáveres fueron trasladados a hospitales de las provincias de Al Bahira, Alejandría y Kafr Sheij, en el norte de Egipto.
Sultan ordenó en un comunicado que continúen las operaciones de búsqueda y que se acelere el proceso legal de entrega de los cuerpos identificados a las familias de las víctimas.
Hasta el momento, han sido rescatadas con vida 164 personas, entre ellos 111 egipcios, 26 sudaneses, 13 eritreos, dos somalíes, un sirio y un etíope, según los datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
De los fallecidos, se sabe que el medio centenar de los cuerpos encontrados en los primeros dos días pertenecen mayoritariamente a nacionales egipcios, así como algunos sudaneses y somalíes.
Ni el gobernador no el portavoz del Ministerio de Sanidad egipcio, Jaled Muyahid, precisaron las nacionalidades de los cadáveres hallados en las últimas horas.
Muyahid explicó a Efe que hay unas 30 ambulancias en el puerto de Bugas Rashid y que si los cuerpos llegan con documentos de identidad se avisa a sus familias y, si no, son conducidos a los hospitales de la zona.
La embarcación naufragada partió con entre 400 y 600 emigrantes a bordo de un punto entre las localidades egipcias de Rashid y Baltím, un área poco poblada desde la que suelen salir barcos que trasladan ilegalmente a los emigrantes, la mayoría con rumbo a las costas italianas.
Entre los emigrantes rescatados se encontraban cuatro marineros que han sido detenidos. Sin embargo, los propietarios de la embarcación y otras personas implicadas en el tráfico de personas continúan huidas.
El número de emigrantes que intenta salir de Egipto a las costas europeas ha aumentado en los últimos meses. Hasta julio de 2016, Egipto se convirtió en el segundo país de partida, después de Libia, según la OIM.
EFE/Foto: eldiario.es