RÍO DE JANEIRO- Después de dos meses de gestión, el presidente brasileño, Michel Temer, es rechazado por el 51.4 % de los pobladores, de acuerdo al último sondeo de la Confederación Nacional de Transporte y la encuestadora MDA.
Esta proyección es de once puntos más que en la medición anterior, lo que revela que, tras la destitución de Dilma Rousseff, Michel Temer sigue sin poder frenar el creciente descontento social.
El 36,7% encuestados , en tanto, considera que la gestión de su Gobierno es «mala o pésima», por encima del 28% que registraba en junio.
«Los resultados muestran un mantenimiento de la evaluación positiva (marcó un 14,6% desde el anterior 11,3%) y un aumento de la percepción negativa del gobierno de Temer», señaló el trabajo realizado entre 2.002 personas y con un margen de error de 2,2 puntos.
Consultados sobre si la situación del país había mejorado durante la gestión Temer en comparación con su antecesora, el 28,1% respondió que no, el 26% que sí, y el 40,5% no detectó cambios. El restante 5,4% no contestó.
La encuesta mostró que el escenario para el presidente luce menos severo a la hora de evaluar el futuro de la maltrecha economía brasileña.
Su principal apuesta en el Congreso, una enmienda constitucional para congelar el gasto público por hasta dos décadas, atándolo al mismo nivel del año previo y aumentándolo sólo por la inflación, obtuvo el amplio respaldo del 60,4% de los consultados.
El 32,5% rechazó la medida, cuyas principales críticas indican que afectará los presupuestos de áreas sensibles como salud y educación.
Un 32,7% de los brasileños, por su parte, cree que la salud empeorará en los próximos seis meses, y un 25,8% espera una mejora.
En educación también es mayoritaria la percepción de que la situación se degradará (31,5%), aunque las expectativas de una mejora crecieron hasta el 26,2% desde el 20,7 por ciento. (ECHA- Agencias)