Su paso fue seguido de cerca por buques militares estadounidenses y japoneses, y se produjo justo después de que la presidenta taiwanesa, Tsai Ing-wen, anunciase a su número dos para las próximas elecciones, previstas para enero de 2020 y a las que concurrirá de nuevo bajo las siglas del gobernante e independentista Partido Democrátivo Progresista (PDP).
El Ministerio confirmó que el ‘002’ navegó de norte a sur con sus fragatas; las fuerzas armadas taiwanesas también desplegaron su mecanismo de supervisión conjunta, que incluye aviones de vigilancia y otras embarcaciones de superficie para seguir los barcos chinos y tratar de disuadirlos.
Una fuente de la institución aseguró que los buques chinos permanecieron en el lado chino de la línea imaginaria que separa el estrecho de Taiwán, y que fueron seguidos de cerca por el barco estadounidense USG Wayne E. Mayer y por el japonés JS Shimakaze.
Las embarcaciones chinas entraron en el estrecho de Taiwán desde el norte la noche del sábado para llevar a cabo una serie de pruebas marítimas, y está previsto que su próximo destino sea el Mar de China Meridional, donde Pekín mantiene una disputa territorial con varios países del sudeste asiático.
Según medios locales, se espera que el ‘002’ vuelva a pasar por el estrecho para volver a su puerto de partida, en Dalian (nordeste de China), y analistas apuntan a que lo hará cerca del próximo 11 de enero, fecha de las elecciones en Taiwán.
En la actualidad, China posee tres portaaviones: el Liaoning, un antiguo buque soviético rehabilitado en 2012 para la Armada china; el ‘002’, que todavía se encuentra en fase de pruebas marítimas, y el ‘003’, que está todavía en construcción.