EEUU.- Bajo peligro de muerte a manos de pandillas rivales, voluntarios “Los Comandos de Salvamento” recorren barriadas de El Salvador para rescatar víctimas de la violencia, y el “heroísmo” de su labor humanitaria es protagonista de un documental difundido en Washington.
El documental de 22 minutos, titulado “Los Comandos” y dirigido por Joshua Bennett y Juliana Schatz-Preston, busca despertar conciencia ante la opinión pública y la clase política en Washington, que a partir de la próxima semana definirá el futuro rumbo de la política migratoria de EEUU, informa el diario estadounidense La Opinión.
Pese a la represión de la Administración Trump contra la población indocumentada, miles de salvadoreños continúan su éxodo hacia EEUU –pagando a contrabandistas hasta $10,000 por el trayecto- porque, según narra la madre de “Mimi” en el documental, “el país está muy peligroso para la juventud”.
https://www.youtube.com/watch?time_continue=2&v=38s1z3o8-MA
El documental describe con gráficas imágenes el “reino del terror” de dos pandillas rivales, la “MS-13” y “Barrio 18”, y cómo “Los Comandos” se ha convertido simultáneamente en una especie de refugio y “familia” para los jóvenes voluntarios.
En camionetas y ambulancias donadas, los paramédicos y demás personal auxiliar voluntario, enfundados en uniformes amarillos, recorren las calles rescatando a víctimas de balaceras o apuñalamientos.
Con apenas 16 años, “Mimi” ya ha tenido que madurar deprisa, enfrentando el dilema de miles de jóvenes: quedarse y arriesgar la muerte a manos de las pandillas, o emigrar a EEUU y afrontar allí el riesgo de la persecución y posible deportación si son detenidos por la Patrulla Fronteriza.
https://www.youtube.com/watch?v=E5v-tdl_ab0
Al sufrir su propia “baja” con el asesinato de Erick Beltrán, de apenas 12 años, los voluntarios reafirman su compromiso con las víctimas, a sabiendas de que están en la mira de las pandillas. Al final, pese a su miedo, “Mimi” decide quedarse y continuar sus labores en “Los Comandos”.
En entrevista exclusiva con este diario, Bennett y Schatz-Preston explicaron que su propósito es poner un rostro humano a la violencia en El Salvador, como uno de los elementos que impulsan la emigración ilegal hacia el Norte.
Josh Bennett y Juliana Schatz-Preston aseguran que los jóvenes que huyen de la violencia no son “bad hombres” y merecen protección internacional. Foto: María Peña/Impremedia
“Salir del país en realidad es la última opción de la gente”, explicó Schatz-Preston, quien señaló que muchos no son “migrantes económicos”, como alega el gobierno de EEUU, sino “gente desplazada a la fuerza, y sin opciones”. (ECHA- Agencias)