ABU DAI.– En la primera visita de un Papa a la península arábiga, cuna del islam, Francisco demandó este domingo que se respeten los acuerdos de tregua en Yemen,una de las zonas de mayor conflicto armado en la región.
El viaje no estaba marcado en las previsoras agendas del Vaticano pero fue una invitación de última hora a finales del año pasado lo que decidió a la Santa Sede en participar en un periplo de 48 horas al lugar con mayor apertura de la región.
Pero el ecumenismo y los procesos interreligiosos son una de las grandes obsesiones del Papa, y la considera que EAU es un escaparate perfecto para lanzar un mensaje de pacificación y apertura de relaciones entre ambas religiones.
El Gobierno del país árabe, integrado por siete emiratos, está presentando la visita como una muestra más de tolerancia y apertura.
Sin embargo, Emiratos tiene un papel importante en la coalición que lleva luchando contra los Huthi desde 2015, y a la que se ha acusado con regularidad de bombardear indiscriminadamente escuelas, mercados y domicilios.
El Papa se ha referido a ellos varias veces en el Ángelus dominical y justo una hora antes de partir hacia Abu Dhabi.
«Con gran preocupación sigo la crisis humanitaria en Yemen. La población está exhausta por el largo conflicto y muchos niños sufren hambre, pero no se logra acceder a los depósitos de alimentos. El grito de esos niños y de sus padres llega hasta Dios. Hago un llamamiento a las partes interesadas y a la comunidad internacional para que favorezcan con urgencia el cumplimiento de los acuerdos alcanzados, aseguren la distribución de alimentos y se trabaje por el bien de la población».
En esa línea, la ONG Human Rights Watch pidió al Papa que aproveche su viaje para denunciar la represión contra los disidentes y la campaña militar en la que participa contra los rebeldes yemeníes, acusada de cometer crímenes contra la población civil.
«A pesar de sus declaraciones a favor de la tolerancia, el Gobierno de Emiratos no ha demostrado verdadero interés a la hora de mejorar las condiciones de vida de la población», ha lamentado la directora de la ONG para Oriente Próximo, Sarah Leah Whitson.
«El Papa debería usar su visita para presionar a los líderes emiratíes», insistió. (ECHA- Agencias)