Dos ideogramas chinos, emotivas caligrafías hechas hace 70 años por personalidades del Partido Kuomintang (KMT) y el Partido Comunista de China (PCCh), recuerdan en la Asociación Lung Sing Sea de la capital peruana el patriotismo de los chinos de ultramar.
Al traducirse al castellano, los ideogramas significan: «Devuelve la tierra de mi país» y «Luchamos por la defensa de la paz mundial».
Estas caligrafías y otros escritos y dibujos de la flora y fauna china son testigos históricos del apoyo brindado por los chinos residentes en Perú al país asiático durante la Guerra de Resistencia del Pueblo Chino contra la Agresión Japonesa (1937-1945).
En esos años, la guerra antijaponesa se había extendido por todo el territorio de China, encendiendo el patriotismo y el civismo de los chinos residentes en ultramar.
Los compatriotas chinos en Perú participaron activamente en la recaudación de fondos, que llegaron al millón de dólares, para continuar la lucha y expulsar a los nipones del territorio nacional. Dicho logro mereció grandes elogios dentro de China y en el extranjero.
En vísperas del 70 aniversario de la victoria del pueblo chino en la Guerra de Resistencia contra la Agresión Japonesa, que se celebra el 3 de septiembre, la agencia Xinhua visitó la Sala de Exposición de Caligrafías de la Asociación Lung Sing Sea, que reúne a ciudadanos oriundos y descendientes de Zhongzhan, provincia china de Guandgong.
La exposición, que mantiene viva la memoria de la época de la lucha del pueblo chino para derrotar al enemigo, se ubica en un edificio modesto de la calle Capón, el Barrio Chino de Lima.
Es un espacio de más de veinte metros cuadrados donde se exponen más de 60 obras, entre originales y reproducciones.
Los visitantes, muchos de los cuales son turistas extranjeros, aprecian que en la parte superior de las paredes están suspendidos los ideogramas chinos originales, enmarcados en vidrio. En la parte inferior se exponen fotos de reproducciones de esas y otras caligrafías.
Por la fuerte humedad de Lima, varias obras originales están manchadas por el moho.
Según explicó Siu Jaukin, presidente honorario de la Sociedad Central de Beneficencia China, el fallecido premier chino Zhou Enlai, entonces subdirector del Departamento Político de la Comisión Militar Central de Chongqing, es autor de seis de los rollos de caligrafía.
Estos tienen un significado especial, pues contribuyeron a la recaudación de fondos para apoyar la guerra contra los invasores japoneses.
Una de la caligrafías de Zhou Enlai dice: «Insistir en una lucha prolongada, insistir en un frente único nacional antijaponés, para establecer una Nueva China bajo los Tres Principios a favor del pueblo chino, y se logrará la victoria de la lucha antijaponesa y la fundación de un nuevo país».
Siu Jaukin comentó que las palabras escritas por Zhou manifiestan la firme posición y el fiel propósito del PCCh de combatir a la invasión japonesa.
El entonces presidente de la Comisión Militar Central, Chiang Kai-shek, escribió: «La ética noble sobrepasa a Bu Shi (un personaje de la antigüedad china reconocido por su generosidad y patriotismo)». Otros generales, políticos y personalidades de China ofrecieron obras con pinturas sobre montañas y aguas, flores y pájaros y personas.
Se considera que estas reflejan las aspiraciones de los autores de unir los esfuerzos de los chinos de ultramar contra Japón.
Siu señaló que las pinturas y caligrafías representan la historia de hace 70 años de donación y recaudación de fondos para ayudar la lucha antijaponesa por parte de los chinos residentes en Perú.
Apenas conocida la agresión al territorio y pueblo chinos, los compatriotas en Perú se activaron para fundar la Federación de Chinos Residentes en Perú para Recaudar Fondos contra la Invasión Japonesa.
La Sociedad China Lung Sing Sea organizó cruzadas de donación y de caridad, y a fines de 1938 el total del fondo recolectado llegó al millón de dólares, una cifra considerable en una época de tensión mundial.
Más tarde, la comunidad china presentó la propuesta de subastar los rollos de caligrafías y pinturas que se habían recibido a fin de recaudar fondos, idea que fue bien acogida por las personalidades en China.
Según los registros históricos, en 1939, la Sociedad China recibió más de 200 obras de caligrafía y de pintura hechas por políticos y artistas famosos de China y enviados desde Chongqing, sede del entonces gobierno chino, a Perú.
En la galería se expone apenas una parte de las obras originales y las réplicas que fueron ofrecidas en la tercera subasta para continuar recaudando fondos para la lucha antijaponesa.
Siu Jaukin fue el de la iniciativa de recuperar estas valiosas piezas. Nacido en 1950 en la provincia de Guangdong, llegó a Perú en 1975.
Durante 15 años ha sido líder de los chinos residentes en Perú, identificándose siempre por su espíritu solidario y humanista de todo corazón para sus compatriotas.
Según Siu, al término de la guerra, las obras no vendidas junto con archivos y fotografías que recuerdan ese tiempo, fueron colocados en un cajón y nadie se había percatado de ello durante más de 40 años.
En 1987, durante una minuciosa revisión del local institucional, a Siu Jaukin le llamó la atención aquel cajón olvidado, en que encontró los históricos y valiosos documentos, cuyo contenido decidió entonces recuperar, registrar y editar.
El trabajo inicial fue muy paciente y difícil, pues él mismo tenía que reproducir a mano los textos, registrar e identificar cada obra. Sabía que era un trabajo significativo porque se trataba de ideogramas y pinturas de valor inestimable y que no tenían similares.
Siu reiteró que muchas de las obras que se exhiben en la galería, tales como las de Zhou Enlai o Chiang Kai-shek, son réplicas de imágenes recuperadas, pues las auténticas fueron subastadas en su momento y son propiedad de particulares o se han extraviado con el paso del tiempo.
En 1989, en conmemoración del 50 aniversario de la tercera recaudación de fondos por los compatriotas chinos en Perú, se realizó una gran exposición de la caligrafía china. Ahora, la galería es un centro abierto de educación y cultura patriótica.
Este año, en que se conmemora el 70 aniversario de la victoria de la guerra mundial antifascista, la galería vuelve a abrir sus puertas, de modo que se recuerde la actuación de los compatriotas chinos en Perú en la lucha contra la agresión japonesa durante la Segunda Guerra Mundial.