ANKARA.- El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, aseguró hoy que las tropas turcas desplegadas en la región de Bashika, cerca de la ciudad iraquí de Mosul, no se retirarán, dado que el gobierno iraquí y el turco han llegado a un acuerdo al respecto.
Erdogan se refirió así, en declaraciones a las televisiones turcas, a la visita a Bagdad ayer del subsecretario del ministerio de Exteriores turco, Feridun Sinirlioglu, y el jefe de la Inteligencia Nacional de Turquía (MIT), Hakan Fidan.
Ambos se reunieron con el primer ministro iraquí, Haidar al Abadi, y con los titulares de Exteriores, Ibrahim al Yafari, y Defensa, Jaled al Obeidi.
En un comunicado sobre la visita emitido hoy, el primer ministro turco, Ahmet Davutoglu, dijo que en las conversaciones mantenidas con los responsables iraquíes se confirmó la determinación turca de apoyar a la administración iraquí en la lucha contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI).
El comunicado añade que «se reorganizarán los militares turcos en Bashika, donde los voluntarios iraquíes se entrenan para luchar contra el EI» y que se trabajará para «establecer nuevos mecanismos para profundizar la cooperación en seguridad con el gobierno iraquí».
No obstante, estas declaraciones parecen estar en contradicción con el anuncio casi simultáneo de gobierno de Irak de que presentará una queja oficial ante el Consejo de Seguridad de la ONU y le pedirá que intervenga para que Turquía retire sus tropas del norte de Irak.
Bagdad considera que el despliegue de fuerzas turcas en su territorio «supone una flagrante violación de la Carta de Naciones Unidas y de la soberanía de Irak», según informó hoy la oficina del primer ministro iraquí, Haidar al Abadi.
El campamento de entrenamiento militar cerca de Bashika, establecido con el objetivo de liberar a Mosul del EI, tuvo repercusión internacional el pasado fin de semana, cuando Turquía mandó 600 soldados y 25 tanques.
El gobierno de Irak protestó en contra de ese despliegue por considerarlo un acto de invasión que se contradice con la ley internacional.
Turquía ha respondido diciendo que el campo se concibió como un lugar de entrenamiento para luchar contra el EI y que la coalición antiterrorista, liderada por Estados Unidos, está al corriente de toda la actividad que se lleva a cabo allí en cooperación con los oficiales iraquíes y los oficiales kurdos iraquíes.
Ankara ha declarado que se ha detenido el reforzamiento turco en Bashika, pero los soldados que ya llegaron no se retirarán, tal y como repitió hoy Erdogan.
Los militares turcos desplegados, que no tienen la misión de combatir, han sido enviados para proteger a los soldados y entrenarles, dijo Erdogan, y añadió que su país está «decidido» a continuar con esas labores de entrenamiento.
EFE/Foto: eldiario.es