RIAD.- Un terrorista suicida del Estado Islámico detonó los explosivos, que llevaba adheridos a su cuerpo, en una mezquita chiíta de Arabia Saudita, en Al Qadih, donde de acuerdo a los yihadistas dejó 250 muertos y heridos, cifra que las autoridades locales señalan en 22 fallecidos.
El Ministerio saudita del Interior confirmó que el suicida activó los explosivos en la mezquita del imán Ali Abi Talib, mientras que los activistas chiítas de la provincia de Al Qatif, consultados por la agencia española EFE, confirmaron la cifra oficial de 22 muertos, hasta el momento.
En las fotografías y videos difundidos en las redes sociales se observa el cadáver destrozado del terrorista suicida, mucha sangre, restos humanos en el suelo, y ambulancias evacuando a las víctimas.
En un comunicado difundido en foros yihadistas, el Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) publicó que «el hermano mártir Abu Amer al Nashdi irrumpió con su cinturón explosivo en una concentración de chiítas infieles en un templo de Al Qadih».
Asimismo aseguró que unas 250 personas murieron o resultaron heridas en el atentado, que coincidió con el rezo musulmán del mediodía del viernes. Tras afirmar que los fieles chiítas insultaban al profeta Mahoma y a sus compañeros y «conspiraban contra los musulmanes (sunitas)».
«Decimos a los que condenaron y van a condenar esta bendita operación que dejen de hacer ruido porque nunca los hemos escuchado y hemos seguido cortando los cuellos de los chiítas con nuestras espadas», indica el comunicado.
Terrorista suicida del Estado Islámico, Abu Amer al Nashdi, que se inmoló en una mezquita de Arabia Saudita
Dirigiéndose a la comunidad chiíta, el ISIS amenazó con «días negros» y juró que sus soldados «no estarán tranquilos hasta expulsar a todos los infieles de la península arábiga».
El pasado noviembre, una grabación atribuida al dirigente del Estado Islámico, Abu Bakr al Bagdadi, llamó a la guerra en Arabia Saudita y urgió a los sauditas a rebelarse, entre otros, contra los chiítas de su país, la familia gobernante Al Saud y el Ejército.
Ese mismo mes fue perpetrado un ataque contra una mezquita chiíta en la población de Al Daluh, en la provincia de Al Ahsá, que se saldó con la muerte de ocho personas por disparos. (ECHA- Agencias)