WASHINGTON/EEUU.- Endureciendo sus presiones más allá del bloqueo económico, el Gobierno de EEUU anunció que prohibirá , desde este miércoles, los viajes en crucero o vuelos privados a Cuba, asestando a la pujante industria que había crecido desde el deshielo iniciado en el 2014.
El Departamento de Estado especificó en un comunicado que «EEUU no permitirá las visitas a Cuba a través de embarcaciones de pasajeros y embarcaciones recreativas, incluidos cruceros y yates, así como aviones privados y corporativos».
A pesar de las nuevas restricciones, los vuelos comerciales podrán seguir operando entre EEUU y Cuba, precisó Steven Mnuchin, secretario del Tesoro de los EEUU.
Las duras medidas fueron confirmadas por Steven Mnuchin, secretario del Tesoro de los EEUU.
Según explicó a Efe una portavoz del Departamento de Estado, el Ejecutivo ha decidido mantener los vuelos comerciales porque suelen ser usados por los cubano-estadounidenses para visitar a sus familias en la isla, mientras que los cruceros se usan para hacer turismo, algo que los estadounidenses tienen prohibido por ley.
En concreto, esa fuente indicó que EEUU ha decidido prohibir los viajes en crucero y yate, así como los vuelos privados y corporativos para impedir que «el régimen cubano y sus servicios militares, que controlan la industria del turismo en Cuba, accedan a dólares estadounidenses».
En Cuba muchos de los hoteles son propiedad de empresas controladas por las Fuerzas Armadas y gestionados en régimen de empresa mixta por corporaciones extranjeras, como el grupo Meliá, con sede en España.
El Gobierno de EEUU también anunció que, a partir de mañana, los estadounidenses tendrán prohibido hacer viajes culturales y educativos de contacto con el pueblo cubano, conocidos en inglés como «people to people» y que habían permitido a miles de personas visitar la isla desde el deshielo iniciado en el 2014.
Ese acercamiento impulsado por el entonces presidente estadounidense, Barack Obama, y su homólogo cubano, Raúl Castro, facilitó los viajes a Cuba e impulsó el negocio a las aerolíneas y cruceros que comenzaron a hacer trayectos comerciales entre los dos países. (ECHA – Agencias)