MADRID.- El rey Felipe VI inició este martes la ronda de consultas con los partidos políticos con representación parlamentaria, antes de proponer un candidato a presidente del Gobierno, cargo al que aspira el líder socialista y actual jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, aunque aún no tiene los apoyos suficientes.
La ronda de consultas del monarca, que marca la Constitución española, era hasta hace unos años una tarea de puro trámite ya que había mayorías claras, pero en la actualidad se complica por la cantidad de partidos con representación parlamentaria.
En total, el monarca recibirá a representantes de 18 formaciones en dos jornadas maratonianas y , como es habitual, comenzará con los partidos de menor representación -regionalistas, nacionalistas, pequeñas formaciones regionales de izquierda – y las concluirá mañana con los mayoritarios.
Las consultas comenzaron el representante de Foro Asturias, un partido regionalista que en los últimos comicios se presentó en coalición con el conservador Partido Popular (PP), principal grupo de oposición y continuarán mañana con los grupos de mayor representación, hasta concluir por la tarde con el líder socialista.
Sánchez aspira a repetir como jefe del ejecutivo, ya que su partido (PSOE) ganó las últimas elecciones generales del pasado 10 de noviembre, con 120 de los 350 escaños del Congreso, pero no tiene mayoría suficiente, con lo que necesita pactar su investidura y un futuro programa de Gobierno con otros grupos, tarea que aún no tiene cerrada.
Esta es la ronda con más partidos de todas las que ha realizado un rey desde la restauración de la monarquía en 1975, y eso que hay cuatro formaciones independentistas que han declinado la invitación, entre ellas ERC (independentistas catalanes de izquierda), grupo clave para la futura investidura de Sánchez, con quien negocian los socialistas.
Tampoco asistirán los independentistas radicales vascos de EH Bildu, ni los catalanes de la CUP, que por primera vez llegan al parlamento español, ni el Bloque Nacionalista Gallego.
Es la octava ronda desde que Felipe VI llegó al trono español hace cinco años, frente a las diez que realizó su padre, Juan Carlos I, en casi 39 años de reinado, lo que da muestra de la inestabilidad política que sufre España desde que en las elecciones de diciembre de 2015 se rompió el tradicional bipartidismo, con la irrupción de nuevos grupos.
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