Beijing (China).- Una de las principales tradiciones milenarias de China es el Festival del Bote del Dragón, celebrado hoy y especialmente singular por su origen patriótico y transformación en un evento deportivo que involucra a millones de personas.
Como cada año, el país se paraliza para conmemorar el Duanwu -el nombre en chino del evento- en el quinto día del quinto mes lunar también en unión de familiares, lo cual implica un movimiento masivo de ciudadanos.
La costumbre marca la preparación y consumo del tamal de arroz glutinoso y vino para honrar al héroe y poeta Qu Yuan (770-221 a.n.e.), quien se suicidó cargado de piedras en el río Miluo en la sureña provincia de Hunan tras ser víctima de calumnias, traiciones y el exilio.
Según la leyenda, después de su muerte muchos compatriotas navegaron el afluente para encontrar sus restos y lanzaban comida para que los peces y dragones no lo devoraran.
De ahí nacieron las competencias entre botes con cabeza y cola de dragón talladas.
El espectáculo se realiza en todo el país y atrae a millones de personas deseosas de ver los distintos barcos remando al unísono y al ritmo de los tambores compitiendo para llegar a la línea de meta.
El Duanwu es uno de los cuatro principales eventos tradicionales de la cultura en China, junto al Qingming, el del Medio Otoño y la Fiesta de la Primavera o Año Nuevo Lunar.
También se le conoce como Festividad de Tamal de Arroz Glutinoso, Festejo de Verano, Baño de Orquídea, Feria de las Hijas o Conmemoración del Poeta.
Fuente y foto Prensa Latina