MEDELLÍN/Colombia.- La investigación y denuncia periodística de problemas sociales como los daños causados por la contaminación, los desaparecidos, la trata de mujeres y la persecución a los inmigrantes indocumentados fueron galardonados este jueves en Medellín con los Premios Gabo 2019.
Las imágenes del conflicto armado colombiano y sus víctimas también estuvieron presentes en la velada que consagró la vida y obra del fotoperiodista Jesús Abad Colorado López, ovacionado de pie al recibir el Reconocimiento a la Excelencia del Premio Gabo.
Esta séptima edición del Festival Gabo, que distingue las mejores historias del periodismo de Iberoamérica, escogió en su séptima edición a los ganadores entre 1.730 postulados a las categorías de Texto, Imagen, Cobertura e Innovación.
«Ellos apuestan por contar la realidad de buena fe y sobre todo por tratar de hacernos entender la realidad a los ciudadanos», dijo en la gala de premiación el director general de la Fundación Gabo, Jaime Abello Banfi, quien destacó que los finalistas «nos traen propuestas que no son solo para los periodistas sino también para la ciudadanía».
El auge del periodismo investigativo y colaborativo en Iberoamérica se puso de manifiesto en los cuatro trabajos galardonados, que ponen el dedo en la llaga de grandes problemas de la sociedad y de esta forma ayudan a que se haga justicia, se esclarezcan crímenes y se cambien conductas.
En la categoría de Texto el galardonado fue el reportaje «La sangre nunca fue amarilla», que reconstruye un caso de envenenamiento por plomo en la localidad habanera de San Miguel del Padrón iniciado a mediados del siglo pasado y que fue publicado por la revista digital independiente cubana Periodismo de Barrio.
«Estamos rodeados por venenos que nunca percibimos (…) No sabemos que muchos de los problemas de salud que padecemos se deben a tóxicos en el ambiente», manifestó la autora, Mónica Baró, al recibir el galardón.
Univisión Noticias Digital, de Estados Unidos, fue premiado en la modalidad de Imagen con «America First: El legado de una redada migratoria», trabajo compuesto por un especial multimedia bilingüe y un documental de 42 minutos sobre las consecuencias de una operación contra 389 indocumentados, en su mayoría guatemaltecos, llevada a cabo en 2008 en Postville, en el estado de Iowa.
Al recoger el premio, la periodista española Almudena Toral habló en nombre del equipo de Univisión y dedicó el galardón «a la gente muy resiliente de Postville, a las familias que todavía siguen rotas» por las redadas migratorias.
El mejor trabajo de Cobertura fue «El país de las dos mil fosas». sobre el drama de los desaparecidos en México, producido por un grupo de periodistas independientes.
Esta investigación hecha por A dónde van los desaparecidos, Quinto Elemento Lab (México y Estados Unidos), mostró por primera vez «la expansión del hallazgo de fosas clandestinas en México entre los años 2006 y 2016», durante el periodo de la llamada guerra contra las drogas.
«Era el momento de buscar las lógicas al terror ante la necesidad de buscar lo inexplicable», expresó la periodista Marcela Turati, quien habló en nombre del equipo galardonado.
Agregó que al hacer esta investigación decidieron «desenterrar las cifras ocultas, sabiendo que no son cifras, son personas sabiendo que cada número representa uno que nos falta y una familia que lo está buscando sin descanso».
Una tragedia de similares características, la trata de mujeres en México y Venezuela, muchas de las cuales acaban asesinadas y desaparecidas, recibió el Premio Gabo en Innovación.
Esta investigación tuvo como punto de partida el asesinato de mujeres venezolanas, argentinas y mexicanas que estaban involucradas con el portal de servicios sexuales zonadivas.info.
«Mujeres en la vitrina, migración en manos de la trata zonadivas.info» es un trabajo de los medios Pie de Página, Fusión, Enjambre Digital (México) y El Pitazo, TalCual, Runrunes (Venezuela).
La periodista Mónica González, que habló en nombre del equipo premiado, señaló que las víctimas de estas redes de trata de mujeres dejan sus países para ir en busca de un sueño «y encuentran acoso, violencia y muerte».
El punto alto de la ceremonia llegó al final de la noche cuando el aclamado Jesús Abad Colorado subió a la tarima por el Reconocimiento a la Excelencia, galardón más que merecido por los 26 años que lleva recorriendo Colombia con su cámara al hombro para retratar la tragedia del conflicto armado y el dolor y la capacidad de resistencia y resiliencia de las víctimas.
En su discurso, repleto de citaciones a su familia y de homenajes a los campesinos que son «los que ponen los muertos en la guerra», pidió que cese el asesinato de líderes sociales, algo que, según dijo, «debería avergonzarnos».
«Cada uno de los que estamos aquí podría ser un líder en el Pacífico o en el Cauca, en el Catatumbo o en el Bajo Cauca, en Nariño o en el Meta, y que tal que cada uno de ustedes fuera asesinado por defender la vida, proyectos medioambientales que lideran para que no se repita la guerra», dijo a los asistentes.
Colorado llevó como invitadas a la gala a varias víctimas del conflicto armado, como Domingo Chalá, que en mayo de 2002 tuvo que recoger los restos de numerosos familiares y vecinos asesinados en Bojayá, en el departamento del Chocó (oeste), matanza que se cobró la vida de al menos 74 personas.
El Festival Gabo también destacó el trabajo de Luis Enrique Rodríguez, director alterno del servicio informativo de Caracol Radio, a quien le fue otorgado el Reconocimiento Clemente Manuel Zabala a un editor colombiano.
EFE/Foto: eltiempo.com