Un conductor de radio y televisión fue acribillado el pasado 15 de mayo al salir de su casa, en el estado de Tabasco. La Federación Internacional de Periodistas (FIP) organización que representa a 600.000 comunicadores y comunicadoras en el mundo, condena este hostil asesinato y exige a las autoridades una investigación seria que determine los responsables.
Se trata del periodista Juan Carlos Huerta, presentador de un programa de televisión y director de una emisora de radio local. Según informó la prensa local, el comunicador salió de su domicilio el martes 15, cuando un grupo de hombres armados le bloqueó el paso con una camioneta y le disparó al menos cuatro veces.
El fiscal del estado, Fernando Valenzuela Pernas, descartó que se haya tratado de un intento de robo, y asegura que los responsables acudieron al lugar especialmente a matarlo. Hasta el momento se buscan a dos sospechosos y aún no se descarta que el motivo del asesinato se vincule con la profesión de la víctima.
Según el registro de la FIP, Juan Carlos Huerta es el tercer reportero asesinado en lo que va del 2018, y se suma a las decenas de casos de violencia extrema que sufre el gremio periodístico en todo el país. El 15 de mayo del 2017, exactamente un año atrás, era asesinado en Sinaloa el periodista Javier Valdez. El comunicador era reconocido por ser autor de varios libros donde relataba el drama del narcotráfico y la situación de los periodistas que desarrollan su labor en el clima de violencia instalado por el crimen organizado en el país norteamericano. Si bien el gobierno mexicano confirmó la detención de uno de los supuestos asesinos, el 99,85% de los crímenes contra periodistas continúa impune.
El Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa (SNRP), afiliado mexicano de la FIP se pronunció: “Exhortamos a las autoridades estatales, asimismo a la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE) a implementar las investigaciones de forma inmediata y destinar los recursos necesarios para castigar con todo el peso de la ley a cada uno de los responsable, pues este crimen lacera no sólo a la sociedad tabasqueña, sino también la libertad de expresión de un país entero. Y resulta emblemático que justo a un año de la muerte de Javier Valdez Cárdenas, otro destacado comunicador resulte vilmente asesinado”.
Ante el alarmante escenario de violencia que sufren los y las periodistas en México, la FIP acompaña el reclamo del SNRP hacia las autoridades para frenar el ataque al gremio periodístico en su conjunto y erradicar la impunidad. La libertad de expresión no puede ejercerse si los periodistas realizan su trabajo en condiciones de temor.
Foto: EFE