PARÍS.- Con un solemne acto a los pies del Arco del Triunfo, en los parisinos Campos Elíseos, el presidente francés, François Hollande, recordó hoy junto a otros responsables de su país e internacionales el 70 aniversario del armisticio firmado por Alemania que puso fin a la II Guerra Mundial.
François Hollande, acompañado de su primer ministro, Manuel Valls, y del titular de Defensa, Jean-Yves Le Drian, depositó flores en la tumba al soldado desconocido, ante la mirada de miles de parisinos y turistas que se agolpaban en torno a los Campos Elíseos para presenciar esta ceremonia, que se repite anualmente.
Antes, Hollande había rendido tributo también al general Charles de Gaulle en la escultura dedicada al militar que contribuyó a liberar Francia de la Ocupación nazi.
Entre los invitados extranjeros se encontraba el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, gran experto en la historia de la II Guerra Mundial, que rindió homenaje al soldado desconocido junto a su homólogo francés, Laurent Fabius, con quien se reunió hoy de forma privada.
En un discurso con motivo de la entrega de los premios del Concurso de la Resistencia a escolares, François Hollande recordó que los franceses ahora «vivimos la guerra como una realidad casi abstracta, cuando no está tan lejos de nosotros».
Así, dijo que «en Oriente Medio, a unas cuatro o cinco horas en avión, hay ciudadanos franceses que en nombre del adoctrinamiento van a perderse en lugares de conflicto».
Al mismo tiempo, enumeró amenazas como las de «un terrorismo que quiere golpear, el racismo, el antisemitismo», y pidió a los jóvenes que se inspiren en el ejemplo de los combatientes de la Resistencia para que no se repita ese capítulo negro de la Historia.
Al homenajear a los miembros de la Resistencia que todavía están vivos, señaló que «estos hombres y mujeres hoy nos interpelan y a nuestras conciencias sobre qué hacemos o qué habríamos hecho en su lugar en ese momento».
«Ellos lo hicieron por un ideal y por un instinto patriótico, el de ponerse en movimiento contra lo intolerable, por el mero hecho de ser humanos», agregó. EFE