PARÍS.- El ministro francés del Interior, Gérald Darmanin, indicó este martes que está estudiando la disolución del movimiento ultraderechista Génération Identitaire por sus recientes acciones contra los inmigrantes, entre ellas una en la frontera española.
Darmanin indicó en conferencia de prensa que ha pedido a su Ministerio que reúna los elementos que podrían conducir a proponer su disolución en el Consejo de Ministros, «en el marco de las reglas y reglamentos de la República».
Génération Identitaire fue fundado en septiembre de 2012 y se presenta en su web como un «movimiento político juvenil» que se considera «en guerra contra todos los que quieren arrancarnos nuestras raíces y hacernos olvidar quiénes somos».
«Nuestra misión es simple: proclamar a gritos nuestro hartazgo, denunciar la invasión migratoria, despertar a nuestro pueblo, defender nuestra identidad», añade en su página, que insta a unirse a aquellos que no se sientan identificados con los discursos políticos.
Una de sus últimas acciones, bautizada como «Misión Pirineos», tuvo lugar el pasado 19 de enero en la frontera con España. Militantes de ese grupo instalaron puestos de control en el departamento de Haute Garonne y realizaron patrullas en todoterrenos.
Las autoridades locales no tardaron en reaccionar y denunciaron que aunque sus acciones «meramente simbólicas no provocaron ninguna alteración en el orden público, movilizaron inútilmente a las fuerzas del orden desviándolas de su misión de vigilancia de la frontera».
En estas acciones, los miembros del grupo van uniformados con un abrigo azul con el nombre de la organización.
Este martes salió en defensa indirecta del grupo el número dos del partido ultraderechista Agrupación Nacional, liderado por Marine Le Pen.
Jordan Bardella recurrió a Twitter para preguntar al ministro cuándo pensaba disolver la asociación de ayuda a la inmigración Utopia 56, «que promueve la ilegalidad y desafía al Estado», o el Colectivo contra la Islamofobia en Francia (CCIF), «que todavía no ha sido disuelto y mantiene sus provocaciones». EFE