El ministro del Ambiente y presidente de la COP20, Manuel Pulgar-Vidal, destacó la encíclica Alabado sea, conocida como Encíclica Verde del papa Francisco, que llama a tomar conciencia en la relación de la humanidad con el medio ambiente.
«Como Perú, como presidencia de la COP (Conferencia de la Partes sobre Cambio Climático de Naciones Unidas), damos la bienvenida a la encíclica porque aporta significativamente en esta toma de conciencia individual para que pongamos de nuestra parte y generemos un cambio», expresó.
Manuel Pulgar-Vidal agregó que el documento del papa Francisco tiene un carácter de largo plazo, pues se refiere al valor ético de la actuación del ser humano frente al cuidado de la casa común, la que calificó de «irresponsable y que no reconoce los límites del planeta, ni de la naturaleza».
En este sentido, resaltó la argumentación del papa Francisco sobre la contaminación, problema que juzgó fundamentalmente como una expresión de egoísmo, pues el debate del tema ambiental es una expresión que se basa en la solidaridad y la ética.
«Tiene una primera parte en la que habla del maltrato de la casa común y aquí entra casi a todos los niveles de degradación: de las condiciones ambientales (aire, suelo y agua); habla del derecho al agua, de los océanos y de las ciudades», añadió Manuel Pulgar-Vidal.
Esta degradación, mencionó el ministro, es producto de la «degradación humana y la degradación social», debido a que el papa Francisco argumenta que las personas malinterpretaron la Biblia en lo que respecta al cuidado del planeta, las condiciones de vida y la habitabilidad.
«Si bien el Génesis habla del dominio del hombre sobre la tierra, el papa Francisco indica que no se trata de dominarla al extremo de degradarla, sino debemos ponerla en un contexto de creación», subrayó.
Foto Efe