Hay un problema estructural: estamos ante un Estado feminicida, machista y patriarcal y ante una violencia institucional y sistémica, subrayó la ex ministra de la Mujer, Aída García-Naranjo Morales, al referirse a la respuesta que da el Estado a los casos de desaparición y referidos a temas de género.
Fue al referirse a la deficiente respuesta que dieron diversas instituciones públicas, como la Policía y el Ministerio Público, en torno al caso del asesinato de la activista feminista Solsiret Rodríguez, quien desapareció en agosto de 2016.
“Si no diagnosticamos claramente que no estamos ante una sucesión de negligencias, sino ante un problema estructural del Estado, ante un Estado feminicida, un estado machista, un estado patriarcal, y ante una violencia institucional y sistémica, entonces eso no tiene un antes o un después en un día”, manifestó en el programa No Hay Derecho de Ideeleradio.
“Es un proceso mayor de otra envergadura, que tiene que ver con educación, campaña, sensibilización, presupuesto, masificación de esos elementos, y un capítulo punitivo también. La ley obliga a los funcionarios a cumplir su función. Mientras la violencia institucional del Estado no asuma el tema como una prioridad, no estamos ante un antes ni un después en el caso de Solsiret”, remarcó.
No solo elementos instrumentales
García-Naranjo Morales enfatizó que, si bien es necesario hacer una reivindicación muy importante sobre determinados elementos instrumentales, como un protocolo ante casos de desaparecidos y un mayor número de cámaras Gesell, la solución al problema pasa por revisar aspectos más profundos.
“No estamos ante un punto de quiebre [en este tema]. En algún momento se pensó lo mismo cuando fue quemada viva Eyvi Agreda o la movilización de Ni Una Menos, que impactó al país y al mundo, y se venía dando en muchísimos países de América.
“Yo particularmente creo que no estamos ante una cadena de negligencias, no puedo aceptar esa tesis. Indudablemente que hay que tener un protocolo para la recepción y seguimiento de casos de desaparecidos, tenemos que apelar al mayor numero de cámaras Gesell, tenemos que reducir los plazos de la telefonía para entregar información sobre los mensajes. Hay elementos bastante más profundos, porque estos son elementos instrumentales”, declaró.
Más presupuesto
La exministra argumentó que el Gobierno debe reflexionar en torno al porcentaje del Presupuesto General de la República que le asigna al Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), pues este bordea actualmente el 0.3%. Insistió en que tiene que haber voluntad política y se tiene que actuar en conjunto con la sociedad.
“¿Implica eso presupuesto?, sí. Al MIMP se le da 0.3% del presupuesto; sin embargo, hay exoneraciones tributarias de 15500 millones, que es 37 veces el presupuesto del MIMP, efectivamente no hemos hecho nada y eso es voluntad política”, recalcó.
“El Perú tiene más de mil normas de género, supera a toda la región, pero se invierte en el MIMP 0.3 a 0.4, y lo que se invierte en otras regiones es 1% o, según la Defensoría, 0.7%. Lo que te quiere decir eso es que no valemos nada. En la medida en que se subvalora, la población lo subvalora”, acotó.