Hoy 19 de febrero se cumple un año de la partida del querido periodista y narrador de la clasificación al Mundial Rusia 2018, Daniel Peredo. Se le recuerda por su polifacética desempeño como comentarista deportivo de prensa escrita, televisión y radio.
El periodista Daniel Kirino Peredo Menchola, apodado en el mundo futbolístico como el ‘Cabezón’, nació el 17 de junio del 1969 en Lima.
Su pasión por el futbol lo llevó a dedicarse profesionalmente en el periodismo deportivo, llegando trabajar en televisión con el programa ‘Goles en acción’, en radio para ‘Radio Callao’, ‘RPP’, ‘Radio Capital’, también como columnista en el diario ‘Ojo’, ‘Bocón’ y ‘El Comercio’, autor de las obras ‘Los 500 datos más caletas de los Mundiales’ (2010), ‘Las caletas de los Mundiales’ (2014) y por último en el 2018 ‘Peredo Total’ y su gran desenvolvimiento como actor en las películas peruanas ‘Calichín’ y ‘Once Machos’.
En el 2008 dio un salto a ‘CMD’ alcanzando la fama por sus emotivas narraciones, frases, sentimientos y su gran memoria privilegiada.
«Gloria al Perú en las alturas», fue una de sus frases acuñada luego de la histórica victoria a Ecuador por 2-1 en Quito en el Eliminatorio rumbo al Mundial de Rusia 2018.
El 15 de noviembre del 2017, cumplió uno de sus sueños. Con una emocionante narración tras la clasificatoria para el Mundial de Rusia 2018, con el gol de Jefferson Farfán en el enfrentamiento ante Nueva Zelanda.
«Apareció Farfán… para decirle a Paolo, tú tranquilo, te esperamos en Rusia», indicó el comentarista tras el gol de Jefferson Farfán.
El 18 de febrero se escuchó su última narración en el partido de Alianza Lima vs. Sporting Cristal que ganó 2-0, por el Torneo Apertura 2018.
“Gol de Sporting Cristal. Este es el Ballón que quería ver el hincha de Sporting Cristal. Un Ballón de oxígeno para Cristal para este momento del partido. Aparece este Ballón que rompe líneas, físicamente impecable”, narró por última vez el periodista peruano Peredo.
El 19 de febrero, luego de una ‘pichanga’ con sus amigos, Daniel Peredo, empezó a sentir malestares. Su amigo Héctor Briceño decidió llevarlo a la clínica San Felipe. Camino al centro médico falleció de un infarto fulminante, enlutando al periodismo deportivo. Tenía 48 años.