RÍO DE JANEIRO.- La iluminación del Cristo Redentor, la gigantesca estatua que corona el cerro del Corcovado de Río de Janeiro y que es uno de los principales símbolos de Brasil, fue apagada esta noche durante la llamada Hora del Planeta.
El Cristo Redentor, que en el 2006 fue elegida en una encuesta en varios países como una de las Siete Nuevas Maravillas del Mundo, fue uno de los 590 monumentos y edificaciones en 156 ciudades de Brasil que se sumaron a la iniciativa mundial de WWF para llamar la atención sobre la gravedad de los cambios climáticos.
La Hora del Planeta, de la que participan 150 países, es un acto convocado por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por su sigla en inglés). Su primera edición fue el 2007 en Sydney (Australia) y actualmente es la mayor movilización medioambiental del mundo, con la participación de más de 7,000 ciudades.
Según WWF Brasil, además de las alcaldías que aceptaron apagar la iluminación de algunos de sus más representativos monumentos entre las 20.30 y las 21.30 hora local (entre las 21.30 GMT del sábado y las 0.30 GMT del domingo), la iniciativa en el mayor país de América Latina fue secundada por 100 empresas y por al menos 146,435 personas que se involucraron en diferentes actividades organizadas.
«Más que el simple hecho de apagar las luces, la Hora del Planeta es una invitación para que las personas reflexionen por cerca de una hora sobre nuestras acciones por el medioambiente, lo que hemos hecho y cómo podemos disminuir el problema», aseguró el director ejecutivo de WWF Brasil, Mauricio Voivodic.
Otros monumentos emblemáticos de Brasil que quedaron en penumbras esta noche fueron la sede del Congreso en Brasilia, el Obelisco de Ibirapuera en Sao Paulo, la iglesia de la Pampulha en Belo Horizonte y el Parque das esculturas de Brennand en Recife.
Para reforzar su iniciativa, la WWF también organizó este sábado en Brasil un paseo ciclístico en Brasilia y una campaña de limpieza de las playas en Río de Janeiro.