La Inteligencia Artificial lee papiro enterrado por la erupción del Vesubio hace 2000 años

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LONDRES.- El interior de un rollo de papiro enterrado por la erupción del Vesubio en el año 79 a.C. ha sido reproducido en imagen por primera vez gracias a técnicas avanzadas.

Se trata de uno de los tres ‘rollos de Herculano’ que se conservan en las Bibliotecas Bodleian de la Universidad de Oxford. Los avances logrados para desenrollar este rollo marcan un avance significativo en la capacidad para recuperar textos del mundo antiguo, señalan los científicos del Vesuvius Challenge, iniciativa internacional lanzada en 2023 para recupera estos rollos de papiro sin intervención física en los mismos.

La imagen del rollo prácticamente desenrollado muestra una parte considerable del papiro y, lo más importante, algunas columnas de texto (con aproximadamente las últimas 26 líneas de cada columna).

Una de las primeras palabras que se tradujo fue una palabra griega antigua que significa ‘repugnancia’, y que aparece dos veces en unas pocas columnas de texto.

Desde que el pergamino fue escaneado en la Diamond Light Source de Harwell en julio de 2024, la instalación científica nacional de sincrotrón del Reino Unido, el equipo del Vesuvius Challenge ha trabajado con inteligencia artificial para unir las imágenes y mejorar la claridad del texto. Los investigadores están refinando aún más la imagen utilizando un nuevo enfoque de segmentación, con la esperanza de que mejore la coherencia y la claridad de las líneas de texto actualmente visibles, y tal vez llegue al final del papiro (la parte más interna del pergamino carbonizado), donde se puede conservar el colofón con el título de la obra.

IA redefine espacios de trabajo e impulsa entornos más eficientes y productivos

El pergamino de Oxford, donado a principios del siglo XIX por Fernando IV, rey de Nápoles y Sicilia, ha demostrado ser único entre los materiales de Herculano debido a la composición química de su tinta, que aparece más claramente en los escaneos de rayos X. Los investigadores plantean la hipótesis de que la tinta puede contener un contaminante más denso, como plomo, pero se necesitarán más pruebas para identificar la ‘receta’ precisa que ha hecho que la tinta sea mucho más legible que otros rollos que han formado parte del Desafío del Vesubio.

El aprendizaje automático empleado para este proyecto se centra únicamente en la detección de la presencia de tinta; los modelos no tienen ningún conocimiento del lenguaje y no pueden reconocer caracteres. Como resultado, la siguiente fase de este esfuerzo (la transcripción y traducción del texto) se confía a la experiencia de académicos humanos. La IA funciona de forma muy similar a los copistas del siglo XVIII, que eran contratados para replicar meticulosamente lo que veían en los rollos sin comprender el texto. Esta falta de comprensión fue, y sigue siendo, una ventaja, ya que garantiza que no se introduzcan ajustes especulativos ni interpretaciones, preservando la integridad del contenido original.

Richard Ovenden, bibliotecario de Bodley y Helen Hamlyn, directora de las bibliotecas de la universidad, comentan en un comunicado: Es un momento increíble en la historia, ya que bibliotecarios, científicos informáticos y académicos del período clásico están colaborando para ver lo invisible. Los asombrosos avances logrados con imágenes e inteligencia artificial nos permiten mirar dentro de pergaminos que no se han leído durante casi 2.000 años. Este proyecto es un ejemplo perfecto de cómo las bibliotecas, las humanidades y la informática complementan sus conocimientos para comprender nuestro pasado común.

Europa Press- Foto internet-medios

 

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